María de LOS ÁNGELES NIVÓN
La Secretaría de Finanzas del Gobierno del Estado a cargo de Enrique Arnaud Viñas, inició una cacería fiscal contra los Pueblos Mancomunados con el cobro del 2% del Impuesto sobre Nómina, que sólo Oaxaca implementó a nivel nacional, con el que pretenden obtener recursos hasta por 1200 millones de pesos de 300 empresas comunales.
La medida fiscal se debe en mucho a que el gobierno de Gabino Cué Monteagudo enfrenta serios aprietos para justificar el déficit millonario que le dejó el pago desorbitante de la nómina magisterial y buscan desesperadamente alguna medida queles permita recuperar el dinero, de ahí que ahora vayan contra las comunidades que integran los Pueblos Mancomunados.
El nuevo impuesto estatal es extra al que dichas empresas comunales le pagan a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) como el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y demás pagos que hacen al fisco, por ello las comunidades como Cuajimoloyas, Amatlán, Benito Juárez, La Nevería, Llano Grande, Latuvi, Ixtlán de Juárez, Textitlán, etc, decidieron no pagar un impuesto que el gobierno se inventó para resolver un problema deficitario en el que ellos no tienen absolutamente nada que ver.
Pero además, estas poblaciones indígenas que cuentan con recursos forestales, de donde subsisten, lograron hacer caminos, áreas naturales de ecoturismo, centros de salud, casas del pueblo, aserraderos con alta tecnología, pero con ¡recursos propios!
A ellos ninguno de los dos niveles de gobierno, estatal y federal, les ha otorgado ni siquiera la oportunidad de acceder a créditos de la banca mexicana, porque el argumento es que no pueden ser sujetos puesto que no cumplen con los requisitos que piden los bancos, las tierras son comunales.
¡Increíble!
A Pueblos Mancomunados lo integran 400 comunidades forestales, las cuales lograron formar 300 empresas comunales, que pagan sus impuestos federales como debe ser, además de ofertar más de 60 mil empleos, cuyos trabajadores cuentan con todas las prestaciones de ley como el Seguro Social, aunque ésta institución no les brinde la atención debida.
Incluso en San Pedro El Alto inauguraron hace unos días un aserradero con la más alta tecnología, obra que les costó 13 millones de pesos.
Incluso, me confirman, las propias comunidades se organizan y apoyan para pagar las atenciones médicas más urgentes a sus paisanos, de ahí que estén molestos y con justa razón, de no querer pagar un impuesto que ni siquiera les corresponde, no le deben nada al gobierno de Oaxaca ni al de la República.
Además, ninguno de los dos niveles de gobierno les compran lo que las comunidades producen, ni siquiera el agua embotellada que es de la más alta calidad, ellos tuvieron que buscar mercados en otros estados, incluso para poder vender los muebles que fabrican.
El gobierno prefiere comprar sillas de plástico a una de madera, no consumen lo que las poblaciones producen, que lamentable.
Pero solo para que se den una idea de lo que los Pueblos Mancomunados producen, ya están trabajando con la ¡Fórmula Uno!…ellos solitos se abrieron su mercado, por eso los persigue la cacería fiscal. En Finanzas andan urgidos de dinero.
En lugar de que el gobierno estatal se aliara con ellos, trabajaran de manera mancomunada, creo que ganaría más apoyando a estos pueblos, que a base de esfuerzo y de lucha han logrado hacerse de mercados que hoy son internacionales, a estarlos persiguiendo.
Me dicen que este tema del terrorismo fiscal estatal viene desde la época en que era titular de Finanzas, Gerardo Cajiga Estrada, quien incluso les dijo en una reunión a las autoridades de Pueblos Mancomunados en tono sarcástico que si “eran marcianos, de qué país vienen”, sin tener la menor idea de lo que es la estructura social comunal.
El tema se pondrá álgido, las autoridades comunales de esos pueblos determinaron en sus asambleas no pagar el impuesto, menuda papa caliente la que tiene en las manos la Secretaría de Finanzas a cargo de Arnaud Viñas.
Adeuda Seguro Popular 170 millones al IMSS
Qué terrible está la situación de salud en Oaxaca.
La falta de operatividad de los Servicios de Salud de Oaxaca por falta de dinero, ha hecho que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se haga cargo en la atención a muchas comunidades del Estado, como el reciente caso del brote de chikungunya en la región de la Costa, donde personal de esta institución tuvo que brindar la atención a los afectados.
Y aunque el IMSS no opera con números rojos, la falta de pago por parte del Seguro Popular cuyo adeudo asciende a 170 millones de pesos, lo ha puesto en serios aprietos, porque no pueden adquirir mejores equiposni tampoco cuentan con nuevas plazas para médicos, es decir, operan medianamente bajo muchas carencias.
Aunque este año, me dicen, lograron un ahorro significativo en el pago de transporte a la ciudad de Puebla de muchos pacientes, que había sido concesionada a una empresa veracruzana y gastaban alrededor de 34 millones de pesos anuales, hoy únicamente pagan 8 millones de pesos por este concepto porque el servicio lo brinda el ADO.
Es decir, el IMSS les entrega sus vales para ser canjeados por boletos en esta línea camionera, hasta con un descuento significativo en el boletaje, lo que representa un ahorro para el IMSS de hasta 26 millones de pesos a la cifra que venían derogando por este concepto.
Imagínense cuánto robaban las anteriores administraciones panistas, ni el IMSS se escapa de los “jugosos negocios”,exactamente lo mismo que ocurre con los SSO y el Seguro Popular, en donde por cierto la Auditoría Superior de la Federación no ha dado a conocer el dictamen de resultados del manejo del presupuesto en esa instancia de salud.
Importante será conocer el manejo indebido que hicieran de los dineros tanto Germán Tenorio Vasconcelos como el priista Martín Vásquez Villanueva, ambos son los ex secretarios de salud con mayores escándalos de presunta corrupción, que hasta ahora no se sabe, se desconoce sí serán llamados a cuenta o no.
Deberían honrar la memoria de doña Lupita Hinojosa
Más que misas cada año, que no es malo, más bien creo que sería mejor que Pepe Murat y su familia honraran a cabalidad la memoria de esa gran mujer que fue doña Lupita Hinojosa, excelente esposa, madre, ejemplo de valentía y trabajo, y no seguir convirtiéndolo en un acto político para demostrar una hegemonía que ni caso tiene.
Ahí estuvieron los dos grupos políticos que siempre han estado con Murat, los verdaderos amigos que siempre le han demostrado su afecto; los “malandrines y fauna silvestre” que le llenan la cabeza de chismes y lo meten en broncas, y le agregaría a la gente nueva que se acerca con la esperanza de encontrar trabajo.
No estuvo el aspirante a la gubernatura Alejandro Murat Hinojosa, quien el viernes por la tarde dejara plantados el evento de los contadores públicos en esta ciudad de Oaxaca de Juárez, pero sí asistió a la fiesta de 15 años de la hija de su coordinador de facto, el innombrable Alejandro Avilés Álvarez.
¿Por qué no vino Alex a la misa de su mamá?…¿será verdad que su papá se lo prohibió?…¿Pepe ya no quiere exponerlo públicamente?…¿guardan prudencia?
Ese es el gran problema con Alex, depender de las decisiones de su padre. Pepe Murat debe entender que ya es tiempo de dejar caminar a su hijo, tiene que aceptar que su presencia y la de la “fauna silvestre” que lo rodea le hacen mucho daño.
Si de verdad Alex quiere crecer políticamente, no ser el hijo de papá, sino un político con carta de presentación propia, debe dar el golpe de timón, está a tiempo para sacudirse inteligentemente la mala influencia, que importa si es o no candidato a la gubernatura por Oaxaca, lo más importante es demostrar que es un político de buena fe y que puede brillar con luz propia.
La mejor carta de presentación que un político puede tener, es dar resultados en la responsabilidad que tengan asignada, en eso debe enfocarse Alejandro Murat Hinojosa, dar respuestas oportunas a la creciente demanda de vivienda que hay en el Infonavit, la mejor receta para crecer en política es el trabajo, trabajo, trabajo, no hay otra fórmula más efectiva.
Ahora bien. Alex no trae ni siquiera una buena estrategia política ni de medios de comunicación.
Al Alex Murat se le ocurrió traer como su jefe de campaña a Guillermo del Pozo, un político que no ha logrado ganar una sola campaña, con el último que trabajó y lo corrió fue Alejandro Moreno, el actual gobernador de Campeche.
También trae a una burbuja como el junior Raúl Bolaños, que toda su corta vida se la pasó estudiando en el extranjero, no conoce Oaxaca, también Benjamín Hernández, el hijo del notario de Pinotepa Nacional que fuera secretario particular de Pepe Murat en su sexenio, quiénes vienen con una falsa idea de ser “chingones”.
Y si a ello le agregamos a Alejandro Avilés Álvarez, pues no le ayudan al chamaco, pero Pepe Murat no lo entiende.
Hoy están ocupados con un equipo de abogados para tratar de revertir el veredicto de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), demasiado tarde, ya hicieron historia con ese tema en el país. Están buscando jurisprudencia.
En fin.
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