Con razón no hay circulante en Oaxaca, priva el desempleo y el desorden.
Grave latrocinio. No cabe duda que Ulises Ruiz Ortiz se quedó corto con la robadera.
Muchas empresas y comerciantes están tronados, unos operan con números rojos y otros de plano bajaron sus cortinas, solo basta darse una vuelta por el Centro Histórico para observar el gran número de locales que están en renta.
Me entero que el quebranto financiero en estos cinco años del gobierno de la alternancia, alcanzan cerca de los 17 mil millones de pesos, que pertenecerían a los desvíos de recursos de las instancias gubernamentales como los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), Secretaría de las Infraestructuras y Ordenamiento Territorial (Sinfra), Caminos y Aeropistas de Oaxaca (CAO), que han sido las más escandalosas sobre hechos de corrupción.
A pesar de que la Comisión Permanente de Auditoria del Congreso del Estado, la misma Secretaría de la Contraloría y la Auditoría Superior del Estado, cuentan con una parte del informe detallado sobre el mal manejo de recursos en estas dependencias estatales, hasta el momento, no han querido echarle el guante a cualquiera de las cabezas visibles.
Más bien dicho, son acuerdos pactados al más alto nivel, en el sentido de que cuando le plantearon al gobernador Gabino Cué Monteagudo, sobre qué prefería, salvar al magisterio oaxaqueño o salvar su administración, puesto que según informes de la Federación, el quebranto financiero en Oaxaca alcanza los 17 mil millones de pesos.
Y le pusieron sobre la mesa los resultados de las revisiones.
Por supuesto, Cué pactó impunidad y permitió que descabezaran al movimiento de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de la Educación (CNTE), que hoy lo ve como un “traidor” a su movimiento.
Por ello, de los peces gordos de esta administración de la alternancia no hay ninguno en la cárcel, solo cayó un “charalito” de nombre Tito Carlos Rangel Hernández, exjefe del Departamento de Operación y Pago de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), que verdaderamente no tiene comparación con la suma de recursos financieros desaparecidos en Salud, por ejemplo, que alcanzan los 558 millones de pesos, eso es de lo que se sabe.
Y qué decir del avioncito de la familia Tenorio, que tiene un valor estimado entre los 225 mil y 235 mil dólares, que al cambio actual se traduce en aproximadamente más de 3 millones y medio de pesos, el cual adquirió el 27 de marzo del 2014 cuando aún era funcionario público.
Para nadie es un secreto también, porque fue ampliamente conocido, cuando Netza Salvatierra, el ex titular de Sinfra, otorgó 173 contratos en 2011, por un monto de 388 millones 269 mil 377 pesos, de los cuales 171 fueron asignados por adjudicación directa o invitación restringida, y sólo en dos casos hubo licitación pública de por medio.
Y qué decir de su mansión recién construida, que nace sobre una fortaleza asentada sobre un terreno de 8 mil metros cuadrados en la colonia La Cascada, la cual absorbe media manzana y cuyo valor es cercano a los 40 millones de pesos.
Nada que ver con el salario mensual que percibía el ex funcionario público, que era de 49 mil 820 pesos y ni siquiera con su aguinaldo acumulado, pudo haber hecho una residencia de ese costo.
De ese tamaño es la corrupción, lamentablemente todo ha quedado en la impunidad, en pactos bajo la mesa al más alto nivel. Así tratan a Oaxaca, como botín político.
Y será muy difícil que la nueva administración que asuma el gobierno de Oaxaca, quiera echarles el guante.
Pepe Toño Estefan, al viejo estilo del PRI
¡Qué bárbaro!
Me quedé sorprendida cuando me comentaron los análisis que hace el precandidato del PRD a la gubernatura de Oaxaca, José Antonio Estefan Garfias, pero muy al estilo viejo dinosaurio priista, como que todavía no se quita la camiseta del tricolor.
Platicaba con un perredista de la línea de Pepe Toño, y me decía que hace un par de semanas, en charla con el tehuano, hacían un análisis sobre la situación del PRD, de los verdaderos resultados de las encuestas, porque sí hay preocupación entre muchos líderes del Sol Azteca, el hecho de que puedan perder las elecciones el próximo 5 de junio.
¿Saben cuál fue la respuesta de Pepe Toño?
“Mira, para ganar Oaxaca se requieren de 500 millones de pesos y Yo ya los tengo, por lo tanto, voy a ganar”.
De ese tamaño, no hay humildad, por lo visto Pepe Toño no aprendió de las experiencias políticas del pasado, su soberbia ha sido siempre el mayor de sus defectos, caray.
Lo mismo ha actuado con varios diputados federales y líderes perredistas que son afín a su competidor de enfrente, a Benjamín Robles Montoya, a quiénes no solo les ha dicho que si no se suman no tendrán nada en su “gobierno”, sino también les ha cerrado las puertas en la Secretaría de Finanzas vía Jorge Castillo Díaz, el vicegobernador.
¡Terrible!
También en una reciente reunión que sostuvo Pepe Toño Estefan con el dirigente nacional del PRD, Agustín Basave en la ciudad de México, para empezar a ver qué postura traía el tehuano, sí estaba en la misma sintonía que el Comité Ejecutivo Nacional, de sumar a todas las expresiones políticas.
Basave le preguntó, palabras más, palabras menos, que si en caso de ser el candidato, qué le daría a Benjamín Robles Montoya, en el entendido que en el PRD había una política de suma, no de resta.
Que Pepe Toño respondió tajante que nada, sí soy el candidato, es porque así lo decidirán las bases del perredismo en Oaxaca, obviamente, el viejo lobo de mar de Agustín Basave pronto se dio cuenta que el aspirante oficial perredista, no trae intención de sumar, le quedó clarísimo.
Pepe Toño no reconoce que no levanta en las mediciones, sus eventos al interior del estado han estado desangelados, como el de Zimatlán de Álvarez que lo máximo que le lograron reunir Mama Eva y su hija Eva Diego, fueron 800 gentes gentes o en el de su apertura de precampaña en la Plaza de la Danza, no la llenó, muchas sillas vacías, las fotos no mienten y su mismo equipo se encargó de enviarlas.
Ahora sobre el método de selección del candidato del PRD a la gubernatura de Oaxaca, que será vía Consejo estatal, donde prácticamente hay un empate técnico entre ambos grupos perredistas y como lo más probable es que uno de los dos se inconforme, porque ni uno ni otro estará de acuerdo en la definición, el asunto se tendrá que ir al CEN.
Por ello, en el convenio emitido por el PRD, hay un apartado que deriva del artículo 91 de sus estatutos internos, donde señalan que el Comité Ejecutivo Nacional del PRD, acompañará el proceso de selección de candidatos y candidatas, de acuerdo a lo establecido en la convocatoria y su normatividad interna.
Este acuerdo se dio por indicaciones del CEN del PRD, de hecho ni el dirigente estatal, Carol Antonio Altamirano Toledo ni Amador Jara Cruz, estuvieron de acuerdo, incluso, hicieron su pancho tratando de evitar la intervención directa de su dirigencia nacional, de ahí que lo más probable es que en la definición del candidato perredista haya mano de la cúpula amarilla.
Los dos escenarios serían: En caso de ser Benjamín Robles Montoya el abanderado del PRD, entonces querrá decir que ¿harán a un lado al gobernador Gabino Cué y todo lo que implique?
Aunque un gobierno en su último tramo de administración, ya no es tan importante, recordemos esa frase ¡muera el rey, viva el rey!
Y en caso de ser el candidato José Antonio Estefan Garfias…¿qué hará Benjamín Robles, se sumará o de plano no meterá las manos?
Al igual que en el PRI, también en la coalición las cosas están complicadas.
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