Jazmín Gómez
Debido a la poca costumbre en Oaxaca de optar por la cremación de sus difuntos prefieren pagar hasta en 50 mil pesos por una tumba en los panteones sobre saturados de la capital que 15 mil pesos por una cremación.
La cremación es una práctica que consiste en deshacer el cuerpo humano muerto quemándolo y fue declarada legal en 1902 en Inglaterra y Gales, después el doctor William Price fue procesado por cremar a su hijo.
Alberto Mauro Martell, administrador de los panteones en la capital, sostuvo que hay familias oaxaqueñas que aun cuando son de escasos recursos, ven la forma de pagar por una tumba antes de optar por la cremación.
Indicó que la cremación, también conocida como incineración, debe convertirse en una práctica más común porque es la única forma de evitar que continúe la sobre saturación en los panteones del Estado.
Destacó que en Oaxaca la gente se resiste a cambiar sus hábitos, sus costumbres y sus estilos de vida y es difícil hacer conciencia sobre la importancia de dejar de optar por los entierros tradicionales.
“Tendría que hacerse mucho trabajo de sensibilización con las personas, algo que probablemente llevaría años”, admitió el administrador de los panteones municipales de la capital oaxaqueña.
Por otra parte, destacó que los cinco panteones existentes en el municipio de Oaxaca de Juárez se encuentran en un lleno total, y es muy costosa la construcción de uno nuevo, además que se tiene que conseguir un terreno en donde vecinos también aprueben el proyecto.