María de los Ángeles NIVÓN
Agencia Estación FOTO
De entrada aun cuando las intenciones del gobernador Alejandro Murat Hinojosa, afectivamente sean la de trabajar por el bien de Oaxaca, los “yupis” de su núcleo más cercano parece que no les ha quedado claro ni el mensaje de su Jefe, ni tampoco que ya no estamos en los tiempos de la colonia.
Solo basta darse una vueltecita por Palacio de Gobierno, donde despachan los “yupis”, precisamente, comandados desde Ciudad Administrativa por el secretario de Desarrollo Social y Humano, Raúl Bolaños Cacho, quien junto con Alfonso Martínez Córdoba y el particular Enrique Madrigal traen un verdadero desorden en el incipiente Gobierno muratista.
Vamos por partes.
Desde muy temprano se observa a decenas de personas deambular por los corredores de Palacio de Gobierno, tuve que constatar lo que algunos lectores ya me habían escrito, y visitar este lunes el recinto emblemático del poder en Oaxaca, para creerlo.
Resulta que la gente que llega desde temprano a Palacio son personas a las que les prometieron empleo durante la campaña, cuando andaban en busca del voto, y el “yupis” Enrique Madrigal no sabe qué hacer, prefiere encerrarse a piedra y lodo en su oficina, deja que la gente se canse de esperar todo el día, no les ofrecen ni un vaso de agua.
Nadie, absolutamente nadie sale a decirles que se vayan porque no hay empleo. Nadie les ofrece una disculpa, al menos, porque no les podrán cumplir con lo prometido en campaña.
Como los oaxacos no traen título de la Ibero, ni del Tecnológico de Monterrey o de Londres, Inglaterra, pues por supuesto los ven poca cosa, así son los “yupis”.
Antes, en el noticiero de Radio Oro de mi compañero Humberto Cruz Matías, el gobernador Alex Murat aseguraba que no habrá ni Chuky, ni Coco, ni personajes “siniestros” mucho menos vicegobernador.
¿Y qué es Raúl Bolaños Cacho?, el que torpedea a todos los del gabinete. ¿Sabrá Alejandro Murat que es el cerebro siniestro de su Gobierno?
Híjole, revivimos los tiempos de Benjamín Robles Montoya.
Pero Enrique Madrigal, quien por supuesto, no conoce Oaxaca, ni siquiera se daba por enterado de lo que su Jefe sentenciaba en radio justo este lunes.
Dijo Alex que los integrantes del gabinete vienen a trabajar y quien no haga bien las cosas se va o se va a la cárcel. Si el Gobernador se entera de que su flamante Secretario Particular no hace bien su chamba, ¿lo va a correr?
Murat Hinojosa debería asomar la cabeza un rato por los corredores de Palacio para que constate el mundo de gente que lo busca con la esperanza de un empleo.
Cuando dijo que no habrá Chuky ni Coco, entonces ¿de quién es la mano que le puso administradores a los secretarios?
Un ejemplo es la Secretaría de Administración donde despacha Javier Villacaña Jiménez, le mandaron administrador y lo mismo para las demás dependencias, así lo hizo Alberto Vargas Varela por órdenes de Coco Castillo, se repite la historia, aquí pregunto: ¿cuál es el cambio?
Tan mal están las cosas en el nuevo Gobierno que a muchos que verdaderamente trabajaron durante la campaña, incluso, invirtieron lana para que ganara el PRI, los hizo a un lado.
Y a otros más les ofreció algunos cargos de consolación, pero hubo uno que tuvo dignidad y le votó el nombramiento, incluso, le escribió una carta donde le daba las gracias por haberlo nombrado director del Instituto de Salud, pero que no estaba por chamba, sino por un proyecto de Gobierno y lo único que le pedía era que le devolviera los 3 millones de pesos que le invirtió a su campaña.
¡Plop!
Por supuesto el Gobernador sabe muy bien a quien nos referimos.
Y lo mismo dejó fuera a muchos más, premió a los que jugaron en el otro bando, pero con ello queda claro cómo serán los primeros 100 días de Gobierno muratista, ya conoceremos la evaluación, igual y en ese lapso se van algunos.
En cuanto a Alfonso Martínez Córdoba, otro personaje “siniestro” que le tiene un gran desprecio a la prensa oaxaqueña, solo basta observar cómo trata a los periodistas locales a quienes no solo los excluyó de la información oficial, sino también de los eventos del gobernador Alejandro Murat, que como reporteros y fotógrafos deben cubrir, es parte de su chamba.
Pero eso sí, pidió un presupuesto de 297 millones de pesos, recursos muy superiores a lo que recibirá, por ejemplo, el Hospital de la Niñez que apenas alcanzó 17 millones de pesos, una mentada, con tantos niños y niñas que padecen cáncer, prefieren ocupar la lana para el glamour.
Y el “yupis” de Comunicación Social ya ha tenido roces con la prensa oaxaqueña precisamente por su total desconocimiento del tema de medios de comunicación, Oaxaca no es la Ciudad de México.
En el evento del encendido del árbol de navidad en la Alameda de León, los secretarios brillaron por su ausencia, no fueron invitados, porque Alfonso Martínez no les corrió la cortesía, con eso de que todo quiere controlar y no controla nada, se le peló invitarlos y eso molestó a su Jefe.
Bueno trae roces hasta con los integrantes del gabinete, porque les pidió que no den ninguna declaración a la prensa, puesto que todo el control será en Comunicación Social, igualito como fue con Gabino Cué Monteagudo.
Hasta eso le copiaron al desastroso gobierno de Cué. Una muy mala copia.
¡Qué pena!
Para la Secretaría de Cultura hay un presupuesto de 155 millones de pesos, Secretaría de Asuntos Indígenas 24 millones de pesos, Caminos y Aeropistas de Oaxaca 192 millones de pesos, Sedafpa 249 millones de pesos y el IEEPO con 22 mil millones de pesos.
Como verán la Coordinación de Comunicación Social se convierte en la súper secretaría y ya veremos si efectivamente los aplican.
Y a pesar de que el ex gobernador José Murat Casab se preocupó justamente por el tema de la prensa, le mandó como apoyo a un comunicador para que junto a Alfonso Martínez Córdoba sacaran la chamba, pero tampoco le permite meter mano, el enviado de Pepe no puede ni siquiera agregar un correo electrónico hasta antes consultarlo con el “yupis”.
De ese tamaño está el área de prensa de Alex Murat, un verdadero desorden. ¿Lo sabrá el Gobernador?
Recientemente, me dicen algunos colegas, hubo un evento en el Salón Gobernadores de Palacio de Gobierno, donde solo “algunos” medios de comunicación fueron invitados, con lo que no contaban es que los tunde-máquina se enteran de todo, hay hasta un chat pirata por donde se filtran todos los eventos oficiales, y que llegan los reporteros.
Citaron para las 13:00 horas, eran las 14:00 horas y los representantes de los medios de comunicación estaban afuera del Salón Gobernadores, cuya reunión era a puerta cerrada, pero eso jamás lo dijo Alfonso Martínez, la invitación la había hecho oficial.
Pues hasta las cansadas se dignaron a abrirles la puerta a los medios de comunicación y solo para que les dijeran que no podían estar.
¡Qué horror!
El tema aquí es el papelón que juega Alfonso Martínez y de paso se lleva entre las patas a su Jefe, al Gobernador, que si bien es cierto tiene las mejores intenciones para el pueblo de Oaxaca, con esos colaboradores para qué quiere enemigos.
Lo que sí sabe Alejandro Murat es que hay una burbuja que le hace mucho daño a su gobierno, que no tienen ni la más remota idea de lo que es Oaxaca y que aún está a tiempo para enderezar el barco, antes de que termine igual o peor que Gabino Cué.
Para que los identifiquen estimados lectores, los “yupis” que le tienen un gran desprecio a Oaxaca son: Raúl Bolaños Cacho Cué, Enrique Madrigal y Alfonso Martínez Córdoba, no los pierdan de vista porque en ellos se reencarnan el Chuky y el Coco Castillo.
Pobre Oaxaca.
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13 diciembre, 2016
