Salina Cruz, Oaxaca. 23 Junio 2017. Para velar por los intereses económicos de los consumidores, el presidente municipal Rodolfo León Aragón, llevó a cabo la firma de una carta de intención con la Delegada de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Lic. Rebeca Leticia Cervantes, con el propósito de contar con los servicios de una oficina en este municipio que atienda las quejas de los ciudadanos.
En la firma de esta carta de intención, estuvo presente el Licenciado Ernesto Marín Contreras, quien estará a cargo de las oficinas de Profeco en este municipio, la cual está ubicada al interior del edificio que anteriormente ocupaba Protección Civil y Bomberos sobre la calle Progreso.
Leticia Cervantes, indicó que la presencia de una oficina en esta ciudad va ser de gran utilidad para los consumidores pues permitirá tener un control de las tiendas o negocios que presenten casos de exceso en sus cobros o no cumplan con lo establecido en sus ofertas y precios.
El principal objetivo de estas oficinas será velar y cuidar la economía de los salinacrucenses y brindar una excelente atención y buen servicio. Además, de atender, canalizar y resolver en buenos términos las solicitudes que se tengan entre proveedor y consumidor.
El responsable de Profeco en este municipio, externó que su función es dar la atención a los ciudadanos por los conductos legales adecuados con la finalidad de que sus necesidades o quejas sean resueltas en el menor tiempo posible.
También dijo, orientará a los consumidores para que hagan las compras en forma adecuada de manera que lo que adquieran se ajuste a su economía y necesidades.
Mientras que, al sector comercial solicitará que tengan precios a la vista a fin de que los consumidores sepan el costo real de las mercancías y no haya importes extras al momento de realizar su pago.
El presidente municipal, agradeció a la delegada de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Rebeca Leticia Cervantes, por permitir el acceso a los habitantes principalmente consumidores de este municipio a contar con una oficina e instancia reguladora que tramite sus quejas sin que resulten afectados en su economía.
