Con respecto a los acuerdos emitidos en la Asamblea Estatal de la Sección XXII, donde se le solicita a las maestras, maestros y directivos de escuelas no aceptar recursos federales para la reconstrucción de las instituciones afectadas por los sismos del mes de septiembre, esta Presidencia del Consejo Estatal de Participación Social en la Educación manifiesta lo siguiente:
1. Toda la comunidad escolar – sobre todo las y los maestros – debe anteponer sobre cualquier cosa la integridad, seguridad y el bienestar de las y los niños de Oaxaca; no podemos politizar una situación de emergencia como la que vivimos. Los recursos – de donde provengan – que están llegando a Oaxaca, están sirviendo para reconstruir la infraestructura educativa de todas y todos los oaxaqueños. No aceptarlos, traerá graves consecuencias para nuestros pequeños y pequeñas. Por eso decimos: no la obstrucción a la reconstrucción.
2. Consideramos el posicionamiento de la Sección XXII falto de toda sensibilidad ya que no prioriza la integridad de nuestros hijos e hijas ni muestra el sentir verdadero de todos y todas las maestras.
3. Nosotros como Consejo hacemos también un reconocimiento a las maestras y maestros que están frente a grupo comprometidos con su alumnado y que han apoyado en la reubicación, reconstrucción y recuperación de contenidos del ciclo escolar.
4. Los padres y las madres de familia no queremos más paros, nuestros hijos e hijas deben estar en las aulas. No queremos comisionados sindicales, sino a docentes en el aula. No queremos maestros y maestras faltistas.
5. Solicitamos a la Secretaría de Educación Pública y al Gobierno del Estado un alto a las acciones cupulares de la Sección XXII, quien ha hecho que los padres y las madres de familia alcemos la voz y exijamos maestros y maestras comprometidas, docentes evaluados e idóneos, que su único compromiso sea la educación y no tomar oficinas o secuestrar a trabajadores.
Queremos que el Gobierno no deje de apoyar el mérito y que aplique la ley en beneficio de todos y todas.
6. Invitamos a las y los maestros de Oaxaca a cerrar filas por la calidad educativa de nuestra niñez y a defender sus derechos como la máxima premisa de nuestra sociedad.
Al final de cuentas, todos y todas queremos lo mejor para nuestras familias.