En Santa María Ixcotel 45 personas, privadas de su libertad, representaron el ViaCrucis este Viernes Santo, en un acto que conmovió a familias y otras personas invitadas al lugar.
El joven que representó a Judas, así como quien representó a Barrabás, provocaron las risas de asistentes, el primero al rompérseles las sandalias y el segundo por la frase bíblica de “soy libre”, cuando en la realidad seguía dentro del penal.
Los azotes que recibió Jesús de Nazaret desde que lo aprehendieron, hasta en su camino a la cruz, que fueron reales en los participantes de la representación teatral basada en pasajes bíblicos, inquietaron a los asistentes que suspiraban continuamente.
Se contó en la representación, que duró poco más de hora y media, con música ambiental que hizo referencia a la época en la que Jesús de Nazaret fue acusado, sin cometer delitos, y sentenciado a muerte.
De acuerdo al director del penal de Santa María Ixcotel, José Jarquín López, estudiar, trabajar o participar en actividades artísticas, sirve a personas privadas de su libertad para ser candidatas a obtener el beneficio de la libertad, siempre y cuando así lo consideren los jueces.
“Me arrepiento y pido perdón por lo que hice”, dice el Cristo de Ixcotel
“Me arrepiento de lo que hice, y pido a las personas que me perdonen por lo que pasó”, dijo Aarón, joven de 25 años de edad y quien representó a Jesús de Nazaret en el ViaCrucis viviente que se realizó en el penal de Santa María Ixcotel, este Viernes Santo.
Aarón está preso desde hace dos años y medio, acusado de homicidio en riña y comenta que a veces se cometen errores graves en la vida, pero nunca es demasiado tarde para arrepentirse.
El Cristo de Ixcotel comentó que la promesa de representar ese papel surgió desde hace varios años, cuando estaba en libertad, y hasta ahora pudo cumplirlo “agradezco a Dios por darme esta oportunidad”.
Es grande el dolor, dice madre de Aarón
Rosalía, madre del Cristo de Ixcotel, afirmó que es muy grande el dolor que se siente cuando se ve a un hijo pasar por momentos de sufrimiento, sin embargo, es Dios quien da la fuerza en todo momento.
Mencionó que Aarón, es el más chico de 6 hermanos, y cuando le pegaron en representación de Jesús de Nazaret le dolió mucho, pero a la vez se siente orgullosa que se le haya permitido representara es papel.
Explicó que ver a un hijo en prisión es un proceso muy difícil, y hay quienes juzgan sin pensar que todos podemos cometer errores y que se paga por esos errores, pero Dios siempre los ha acompañado como familia en esta etapa.