Ciudad de México. Las empresas que dinamitan cerros de basalto y tezontle para usarlo en la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (NAICM) dejaron abandonados en noviembre pasado unos 48 kilogramos de explosivos C-4 bajo el sol y sin resguardo alguno. Por estos hechos hay una denuncia en la Procuraduría General de la República (PGR) desde diciembre, pero no se reportan avances en las indagatorias.
El presidente de la comisión especial que da seguimiento a la construcción del NAICM en la Cámara de Diputados, Rafael Hernández Soriano, atribuyó el material abandonado al Grupo Minero Betancourt y dijo que el explosivo fue decomisado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), pero en su momento quedó bajo varios árboles en Cerro Gordo, ubicado en el municipio de San Martín de las Pirámides, estado de México, al norte de donde se desarrolla el proyecto.