En mi opinión, López Obrador ganó el segundo debate, sobre todo porque ahora respondió con humor a las agresiones, que no le hicieron daño, sino que, por haber sido expresadas con excesiva agresividad —fue el caso de Anaya en casi todas sus intervenciones—, terminaron por favorecer al candidato de Morena.
Se vio muy buen Andrés Manuel cuando escondió su cartera para que no se la fuera a robar Ricardo Anaya.
Y se vio todavía mejor cuando, sin complejos, abrazó a Meade después de que El Bronco Rodríguez le pidiera ese gesto al tabasqueño.
Si no fuera suficiente con lo anterior, habría que decir que AMLO resultó victorioso porque sus rivales no le hicieron daño, así que podrá seguir con toda comodidad encabezando, con prácticamente 20 puntos de ventaja, todas las encuestas.
¿Quién estuvo mejor de Meade o Anaya?
Más importante era saner a quién iba a beneficiar el debate de candidatos presidenciales celebrado en Tijuana, si a José Antonio Meade o al señor Anaya.
Pregunté a un experto en TV de calidad mundial, el catalán Xavi Roca, que vio todo el debate y que ha trabajado suficiente tiempo en México como para conocer la política de nuestro país.
Esto fue lo que me dijo;
√ “Hoy puede subir Meade. Le trabajaron bien estas semanas. Está más cómodo en su espacio”.
√ “Anaya demasiado frontal. Con tanto reproche, en lugar de rascar (a AMLO), le está victimizando”.
En resumidas cuentas, AMLO y Meade ganaron en Tijuana… y Anaya, por agresivo y vulgar en sus insultos perdió.
