Portugal logró su objetivo que era sumar tres puntos de oro para acercarse a su pase a octavos de la Copa del mundo. Lo hizo gracias a un gol más de Cristiano Ronaldo, a su trabajo defensivo y a la falta de remate de Marruecos. El empate hubiera sido más justo, pero en el fútbol deciden los tantos. Eso sí, el resultado, según lo que haga la Roja frente a Irán puede quedar corto en caso de necesidad de echar mano al final para ver quien es primero y segundo de la diferencia de goles. La ‘Seleçao das Quinas’ recordó la que fue campeona de Europa en Francia 2016, ganó sin jugar bien, fiándolo todo a CR7 y a su fortaleza defensiva. Con decir que su mejor hombre fue el portero Rui Patricio.
Portugal logró su mejor clasificación en la Copa del mundo en Inglaterra, en 1966 gracias a un tal Eusebio da Silva Ferreira, un delantero como han habido pocos. Ahora, en Rusia 2018, lleva el mismo camino gracias a su heredero Cristiano Ronaldo. Ante Marruecos logró el 1-0 que fue el tanto 85 que le convierte en el máximo goleador internacional superando a un mito como Ferenç Puskas.Y ya sólo le queda por delante al iranía Alí Daei. De paso, se permite el lujo de igualar a otro histórico delantero portugués, a JoséTorres, marcando en un mismo mundial con la cabeza, el pie derecho y el izquierdo. Lleva cuatro goles en cuatro partidos. No diga Portugal, pronuncie CR7.
Otra vez decsivo
Si contra España su ‘hat trick’ evitó la victoria de la Roja, ante Marruecos sucedió igual. Su gol, tras un saque de esquina con falta previa de Pepe, fue una plancha bonita y eficaz, un cabezazo de ‘killer’ dentro del área pequeña. Luego la ‘Selaçao das Quinas’ se dedicó a administrar la renta. En toda la primera mitad sólo creó una buena oportunidad en un remate de volea de Gonçalo Guedes que Monir El Kajoui desvió en gran intervención.
Marruecos por su parte tuvo el balón, trató de llegar con un futbol de combinación, aunque carente de mordiente. Eso sí, se vio claramente perjudicado por el colegiado estadounidense y sus ayudantes que tuvieron dos varas de medir y parecen desconocer el reglamento del fútbol. Un cabezazo de Mehdi Benatia, que obligó a Rui Patricio a hacer una gran parada sobre la linea, fue su oportunidad más clara, junto a un tiro de Hakim Ziyach.El conjunto del francés Hervé Renard tratan bien el balón, juegan y presionan bien, pero les falta ‘punch’. Ya les pasó lo mismo ante Irán a la que dominaron pero acabaron perdiendo el partido.
Más intensidad
Tras el descanso, los marroquíes aún aumentaron la intensidad de su juego y obligaron a Portugal a echarse atrás. Crearon una y otra ocasión de gol. Younes Belhanda tuvo dos, sobre todo, un cabezazo, que volvió a ser detenido en gran parada por un inspirado Rui Patricio. La ‘Seleçao das Quintas’ pasaba ciertamente por apuros.
Fernando Santos decidió dar entrada a Gelson Martins por Bernardo Silva, lo hizo para incorporar a otro atacante, especialista en el contra ataque.
Marruecos siguió su ataque infructuoso. Su dominio fue total. Tanto que el portero de Marruecos, Monir El Kajoui era un mero espectador. La defensa portuguesa trabajaba a destajo. Pudo marcar Mehdi Benatia, pero le dio con la espalda, un tiro de Nabil Dirar fue fuera por poco… Fernando Santos metió a Adrien Silva por Joao Moutinho para dar aún más consistencia física a su bloque defensivo.
En los minutos de descuento, la tuvo en sus botas Faycal Fajr, pero su tiro rebotó en un defensa y salvó a Portugal. No era el día del buen equipo del Magreb El equipo de Hervé Renard nadaba y nadaba hasta la extenuación para llegar al gol del empate. Pero se ahogó sin conseguirlo y queda eliminado del mundial. No lo merecía de esta forma por su juego y empeño. Aunque no fue capaz de marcar un solo tanto en dos partidos y eso se paga caro.