CDMX.- El Banco Mundial identificó que en México ha crecido el “muy persistente” problema de los jóvenes que ni estudian ni trabajan (ninis), lo que “puede estar vinculado al crimen organizado y a la violencia, lo que aumenta los riesgos para los jóvenes y la sociedad en su conjunto”.
En su informe Ninis en América Latina, 20 millones de jóvenes en busca de oportunidades, el organismo internacional describe que en México ese problema se presenta por tres factores: “Un incremento en la proporción de ninis hombres, la falta de oportunidades laborales para los jóvenes y un incremento en el mercado ilegal que hizo que el crimen organizado demandara más trabajadores”.
LO RELACIONAN CON EL CRIMEN ORGANIZADO
Agrega que si los resultados para México pueden extrapolarse a otros países de la región la existencia de ninis hombres también podría estar correlacionada con la violencia en países centroamericanos como Honduras, Guatemala, Panamá y El Salvador.
“Algunos ninis podrían participar en actividades delictivas que causan perjuicios enormes, no solamente a ellos mismos, sino también al bienestar de la sociedad”.
Basado en datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, y en estadísticas oficiales sobre las tasas de homicidios en el país, el estudio encontró que entre 2008 y 2013, cuando se triplicaron las tasas de homicidios en México, existió “una correlación positiva y significativa entre la proporción de ninis y la tasa de homicidios.
También se registra una correlación positiva y significativa entre los ninis y las tasas de homicidios en los estados fronterizos con Estados Unidos, una región muy afectada tanto por el crimen organizado como por la crisis económica de 2008 y 2009”.
PERFIL DEL NINI MEXICANO
El perfil del nini mexicano y latinoamericano es un varón que tiene entre 19 y 24 años de edad, vive en las ciudades y no terminó el bachillerato. Normalmente el camino que lo lleva a esta condición, sobre todo entre hombres, es la deserción escolar temprana para empezar a trabajar, seguida del desempleo.
“Al abandonar la escuela antes de terminar el bachillerato los jóvenes por lo general carecen de las habilidades necesarias para conseguir un trabajo en el sector formal, por lo que en la mayoría de los casos se conforman con empleos temporales e inestables en el sector informal. Una vez que pierden estos puestos de trabajo, nunca regresan a la escuela”, explica.
Son los hombres quienes han contribuido al incremento en el número de ninis en la región, puesto que mientras que las mujeres se han incorporado al mercado de trabajo, “en un contexto en el que la creación de empleos es limitada, a ellos les resulta más complicado obtener trabajo. Durante los últimos 20 años aumentaron tanto la proporción como el número absoluto de hombres nini”.
Las mujeres representan dos tercios de la población nini de la región y los factores de riesgo más importantes que enfrentan son el matrimonio antes de los 18 años y el embarazo durante la adolescencia; entre los rasgos comunes está que no terminaron la secundaria, viven en las ciudades y están en condiciones de pobreza o vulnerabilidad.