De tres golpes conocidos en el ámbito policial como “soplamocos” , un taxista foráneo puso quieto a un policial vial; poniendo en practica el protocolo de defensa, el guardián del orden respondió, de ésta manera protagonizarán fenomenal pelea cuerpo a cuerpo, cara a cara.
Los gritos de “duro, duro”, del respetable publico que presenció la férrea pelea, alertó a mas parroquianos que estaban en espera de autobuses y taxis en la parada del “Parque del Amor”