La Cámara Nacional de la Industria del Mezcal (Canaimez) llamó a no descuidar las cualidades y el nombre del mezcal de México en el mercado internacional, ya que otros países (como es el caso de Sudáfrica) han comenzado a fabricar destilados del agave que incluso comercian bajo la denominación de “mezcal”.
En entrevista, Gabriel Pacheco, propietario de la marca Viejo Indecente y socio activo de la Cámara Nacional de la Industria del Mezcal, advirtió sobre la presencia de marcas de fabricación extranjera, que comienzan a comercializar sus bebidas como mezcal.
“Encontramos que hay una marca en específico que lo está produciendo, y en diferentes partes de su sitio web menciona un destilado que se entiende claramente como Mezcal; incluso en sus redes sociales lo declaran como “nuestro mezcal” aseguró.
Agregó que independientemente de cuidar la Denominación de Origen Mezcal en los estados y municipios mexicanos ubicados dentro de su protección geográfica, hay que dar prioridad y abrir el debate sobre la protección ante otros países, que ya comienzan a destilar el agave, que si bien, es una planta crece en gran parte del continente, México es el centro endémico y origen de la misma. Ya deberían existir los mecanismos de blindaje contra esas prácticas indebidas e ilegales.
“Independientemente de meternos en la denominación de origen por municipio, en el país lo más importante es sí asegurarnos que el mezcal sea mexicano, y solo mexicano. No es discusión, no hay un tema de criterios, sin duda el mezcal es mexicano y deberíamos de protegerlo’, dijo.
Al referirse sobre la inexistencia de una normatividad internacional que regule y controle la producción destilados de agave en otros países, Gabriel Pacheco hizo un llamado al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, para comience la creación de la misma y por ende la defensa del mezcal ante otros países.
“Sí que nos interesa tener una protección hoy ante Sudáfrica o cualquier otro país del mundo con un ecosistema que pueda sustentar agaves, ––que pueden ser muchos por la resiliencia del mismo–– entonces asegurarlo con la creación de un mecanismo ––aún no sabemos cuál podría ser––, pero debería ser el IMPI el que debe dar la pauta para su creación y así poder defenderlo y desincentivar a otros países sobre producción de este destilado que es propiamente nuestro’, sentenció.
Así mismo, hizo un llamado a la unión del gremio mezcalero en el país y a cerrar filas a con un mismo fin, ya que el mezcal tiene un “gran potencial”, no solo como bebida de calidad y posicionada en el mundo, sino como impulsor del desarrollo económico y social, sobre todo para los sectores más vulnerables de la cadena de producción.
“Pienso que hay mucho conflicto, lo vemos con el tema que tenemos ahora entre Estados, entre productores, entre campesinos y comercializadores, creo firmemente que hay una oportunidad de hacer algo muy grande.
“En Mezcal “Viejo Indecente” pensamos que el mezcal es un producto extraordinario y excepcional, y que debería de ser un motor de cambio social para México, ya que puede provocar el cambio en un grupo de mexicanos que siempre están expuestos y que de pronto podrían encontrarse al otro lado de la historia, estamos desperdiciando la oportunidad, concluyó.