Los funcionarios del gobierno federal que no haya hecho pública su declaración patrimonial este 30 de enero deberán separarse de sus cargos, emplazó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Desde el inicio de su administración, el presidente hizo el llamado a que los funcionarios de su primer círculo hicieran públicas sus declaraciones patrimoniales, de sus cónyuges y de interés a través del portal Declaranet.
El que no presente su declaración de bienes no puede trabajar en el gobierno”, enfatizó el presidente en su rueda de prensa matutina de martes en Palacio Nacional.
Si bien todos los funcionarios están obligados a presentar su declaración patrimonial, tienen la prerrogativa de que sus datos se mantengan reservadosy que no se haga pública.
Por congruencia con la política de transparencia impulsada por el gobierno federal, los funcionarios del gabinete y los principales colaboradores de la presidencia no pueden mantener oculta su información de bienes y de conflictos de intereses.
Sí, además, no sólo presentarla formalmente, sino hacerlo público. El que no haga público, no puede trabajar en el gobierno”, reiteró López Obrador.
El presidente dijo el pasado 3 de enero que sus colaboradores debían subir información de su patrimonio y conflicto de intereses en la plataforma de Declaranet, y hacerla pública.
Entre quienes en primera instancia se habían negado a hacer pública sus declaraciones y finalmente aceptaron que todo el público tuviera acceso a ellas están Julio Scherer Ibarra, Consejero Jurídico de la Presidencia, y el secretario de Educación, Esteban Moctezuma; Lázaro Cárdenas Batel, jefe de asesores; Alfonso Romo, jefe de la oficina de la Presidencia, y su secretario particular, Alejandro Esquer.
Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación es de las integrantes del gabinete que no hay liberado su declaración patrimonial para su consulta pública.