México.- El jefe de la Oficina de la Presidencia de México, Alfonso Romo, dio a conocer ante empresarios que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), pidió “más recortes” presupuestarios a las Secretaríaspara evitar incrementos del déficit.
“En las últimas dos semanas nos ha pedido más recortes. El problema de recortar tanto es que yo veo a las secretarías agobiadas, por eso las defiendo porque les quitaron una gran parte de presupuesto y de la gente”, aseguró Romo, mano derecha del presidente.
Durante un desayuno en la 102 Asamblea General de la American Chamber Mexico, Alfonso Romo prometió que el nuevo Gobierno mexicano tiene “una determinación a no incurrir déficit fiscal”, un mandato que se aplicará “para bien o para mal”.
Aunque admitió que los recortes en la Administración dificultan las cosas al Gobierno, el jefe de Oficina de la Presidencia aseguró que la lucha contra el déficit es la primera prioridad.
Y añadió que luego ya se verá cómo corrigen los efectos negativos de estos recortes.
Asimismo, Romo pidió a los empresarios estadounidenses en México que “ayuden al presidente” a alcanzar su objetivo de que la economía mexicana crezca al 4 % del producto interno bruto (PIB) anual, ya que actualmente la cifra ronda el 2 %.
“Si les convencemos a ustedes de que inviertan un 20 % más, este país no lo para nadie. Vivimos un momento político y geopolítico ideal”, expresó el también titular del Consejo para el Fomento a la Inversión, el Empleo y el Crecimiento Económico.
Preguntado por los empresarios sobre los problemas financieros de la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), Romo aseguró que el Gobierno tiene un plan estructural para “limpiar” la estatal “de corrupción y aumentar su producción”.
Romo también situó como una prioridad “la paz laboral” dentro de las empresas y ofreció a los empresarios la posibilidad de que el Gobierno actúe como mediador en los conflictos con los trabajadores.
El jefe de la Oficina de la Presidencia fue cuestionado sobre las polémicas consultas ciudadanas que López Obrador ha utilizado para decidir el futuro de infraestructuras importantes como el nuevo Aeropuerto de Ciudad de México, cuya construcción fue cancelada.
Romo respondió que “de los errores se aprende” -puesto que estas consultas fueron consideradas poco transparentes- y recordó que se está trabajando para que los futuros referendos los organice el Instituto Nacional Electoral (INE).
Asimismo, quitó hierro a las declaraciones que el presidente mexicano hace contra los empresarios conservadores, a los que llama “fifís” y sentenció: “Si (López Obrador) dividiera la sociedad, no tendría un 80 % de aprobación”.