La Paz.- Una activista defensora de los animales sorprendió este jueves al presidente de Bolivia, Evo Morales, al regalarle un perro que fue rescatado en un deslizamiento de tierra que ocasionó el desplome de decenas de viviendas a fines de abril.
Para entregar el perro a Morales, la joven, cuyo nombre no ha trascendido, aprovechó un acto de premiación en La Paz a organizaciones no gubernamentales defensoras de los animales que participaron en un concurso organizado por el Ministerio de Planificación del Desarrollo de Bolivia.
La activista contó que encontró al perro tras el deslizamiento de tierra ocurrido el pasado 30 de abril en las zonas San Jorge Kantutani e Inmaculada Concepción de La Paz.
“En todo este tiempo estuve buscando un hogar para él porque se hizo muy amigo mío y ahora va a encontrar un excelente hogar que va a ser el suyo”, sostuvo la muchacha, en medio de las risas y aplausos de los asistentes.
La joven entregó a Morales el certificado de vacunas y esterilización del animalito e hizo firmar al mandatario un compromiso de tenencia responsable “para ver que va a estar bien, que es obvio que sí lo va a estar”, afirmó la activista.
El perro, un mestizo de color dorado, se llamaba Gringo, pero el gobernante pidió permiso para cambiarle el nombre a Ringo para que no se moleste “alguna gente” e incluso bromeó al recordar que a su embajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA), José Alberto Gonzales, le dicen “Gringo”.
Morales felicitó a la muchacha por haber rescatado al perro y sostuvo que hará “todo lo posible por acompañarlo”.
El presidente reconoció que por su intensa agenda de trabajo, que comienza en la madrugada y acaba tarde en la noche, le es complicado incluso estar con sus hijos.
Morales contó que, por ejemplo, en una ocasión, cuando su hijo pasó unas vacaciones con él, lo tuvo que hacer llevar al Palacio de Gobierno para compartir algunas comidas.
“Eso voy a tener que hacer con el Gringo, que venga a comer, a almorzar a la Casa Grande del Pueblo”, comentó.