Ciudad de México. Después de semanas de intensas de negociaciones, anoche el gobierno federal alcanzó un acuerdo con tres de las cuatro empresas constructoras de gasoductos para el suministro de combustible a las plantas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que va a significar un ahorro para la hacienda pública de unos 4 mil 500 millones de dólares, anunció el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En su conferencia diaria, el mandatario destacó la participación en las negociaciones de Carlos Slim, propietario de una de las compañías involucradas, así como la intermediación de los dirigentes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar y del Consejo Mexicano de Negocios, Antonio Del Valle.
“Con este acuerdo, como un asunto adicional, pero muy importante, se garantiza el abasto de gas –por más de 20 años– para la industria eléctrica, para que no tengamos apagones en muchos años y para el fomento de la industria nacional. Vamos a tener gas suficiente en México”, dijo el presidente.
El acuerdo se alcanzó con Grupo Carso, de Slim; IEnova (de Tania Ortiz Mena) y TC Energía (Carlos Borunda Zaragoza). Queda pendiente la negociación con Fermaca (Fernando Calvillo Álvarez y Manuel Calvillo Álvarez, presidente y director general, respectivamente), que se hará “con paciencia”, señaló López Obrador.
Bajo los nuevos términos, cambia la forma de pago a las empresas de una tarifa creciente a otra fija y nivelada a través del tiempo y se prevén “acuerdos equilibrados sobre casos fortuitos y de fuerza mayor”, en los que hay un expreso desistimiento al uso de cualquier acción legal, informó el director de la CFE, Manuel Bartlett.
Empresas ceden utilidades
“Hay una aportación de las empresas en cuanto a sus utilidades, sin duda, una disminución de manera general de más de 30 por ciento. Para nosotros fue un buen acuerdo”, agregó el mandatario.
Dijo que con este acuerdo la CFE compra el gas y el particular pone el servicio y el transporte; el tubo le queda a la empresa, por lo que baja la tarifa.
López Obrador también rechazó la posibilidad de expropiar. “Nosotros no vamos a expropiar ninguna buen privado”.
“Al obtener buenos precios en el transporte del gas, podemos mantener el compromiso de no aumentar en términos reales el precio de la energía eléctrica a las consumidores”, señaló el presidente.
El acuerdo “fue posible por la voluntad, la disposición al diálogo de los empresarios, porque legalmente ya se habían firmado los contratos. Ya se habían acordado condiciones que nosotros consideramos dañinas para la hacienda publica”, dijo López Obrador.
Destacó que fue muy importante que Grupo Carso desde el inicio haya aceptado participar en la negociación, por lo que hizo un reconocimiento a Carlos Slim, quien fue el primero en llegar al acuerdo con la CFE.
“Esto marcó la pauta para lograr los acuerdos posteriores. Pero así actuaron todas las demás empresas, con mucha responsabilidad”. Explicó que con este acuerdo se retiran quejas y denuncias. “Se llega a un acuerdo sin arbitraje internacional”.
Slim enfatizó en que este acuerdo permitirá a México tener acceso al gas más barato que hay en el mundo, que se produce en Texas, donde ya cuenta el país infraestructura de conexión para emplearlo en las plantas de la CFE y apoyar a la industria nacional.
A su vez, el presidente del CCE, Carlos Salazar, destacó que el acuerdo permitirá fortalecer la confianza del sector empresarial para realizar mayores inversiones. Dijo que la iniciativa privada está satisfecha con el proceso y auguró que se podrá retomar el rumbo de la economía para alcanzar mejores tasas de crecimiento.