El presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a los participantes en la marcha por el 2 de octubre a no ocultar su rostro, ‘porque el que lucha por la justicia no tiene nada que temer’.
“Fuera máscaras el que lucha por la justicia, la libertad, la democracia, no tiene por qué ocultar su rostro tiene que dar la cara y tampoco puede traer armas, sean piedras, petardos, varillas, nada de eso, no se requieren esas formas”, dijo en rueda de prensa desde Palacio Nacional.
A los provocadores que se infiltran en las marchas, el mandatario les envió un mensaje:
“Tengan cuidado porque los voy a acusar con sus mamás, con sus papás, sus abuelos, porque estoy seguro que los abuelos, las mamás, los papás no están de acuerdo, me dejo de llamar Andrés Manuel, estoy seguro que los ven o los verían como malcriados, que no deben andar haciendo eso, les darían hasta sus jalones de oreja, sus zapes, también”.
En tanto, indicó que de cualquier forma va a estar pendiente la autoridad a cargo de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, “Vemos muy bien el que participen civiles vestidos de blanco, es el momento de llamar a la paz y que no nos confundan o no mientan porque lo mas importante de un revolucionario verdadero es la honestidad, la congruencia”, abundó.
`Nunca más un 68’
Al recordar el movimiento estudiantil de 1968, el mandatario aseguró que México se encuentra en una etapa nueva y prometió que nunca se repetirán esos hechos de represión en el país.
“Estamos en una etapa nueva en la que el uso de la fuerza ha quedado relegado […] nosotros queremos vivir en una sociedad en paz, sin violencia, sin usar la fuerza, convencer no vencer, persuadir, dialogar, vivir en armonía, vivir en paz, por eso nunca más una represión en México, nunca más torturas, desapariciones, masacres, nunca más un 68 y se está logrando establecer esta nueva política a pesar de provocaciones y de afanes autoritarios”, dijo.
Aseguró que su gobierno no es autoritario y eso se puede constatar porque la Comisión de Derechos Humanos no ha hecho recomendación alguna sobre ello debido a que no se ha permitido ningún exceso de las autoridades.
“Surge la esperanza de un México nuevo, distinto, mejor, no fue en vano ese sacrificio, esa lucha, a partir de ahí empieza a haber una apertura y eso nos permite que se lleven a cabo los cambios en el país y que ahora se esté iniciando una transformación y garantizado las libertades y estableciendo un verdadero Estado de derecho y una autentica democracia; ese es el propósito que tenemos”, refirió.
Asimismo, reiteró que el uso de la fuerza no es la opción para resolver problemas que se originan por la falta de libertades y justicia.