Tras la destitución del magistrado Jorge Arturo Camero Ocampo por supuestamente haber recibido 80 millones de pesos en sus cuentas, cuyo origen no pudo explicar, el presidente Andrés Manuel López Obrador celebró que se combata la corrupción en el Poder Judicial.
El titular del Ejecutivo afirmó que el Poder Judicial se caracterizaba por ser opaco, no ventilaba sus asuntos, y era como la película El castillo de la pureza, de Arturo Ripstein.
“Yo celebro que se actúe en el Poder Judicial para combatir la corrupción (…) había mucho hermetismo, era como El castillo de la pureza, y ahora se dan estos casos. Por eso lo celebro. Y desde luego esto va a generar polémica, pero qué bueno que se ventile todo este asunto”, puntualizó el Presidente en su rueda de prensa en Palacio Nacional.
Afirmó que el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación está haciendo un esfuerzo importante en limpiar de corrupción al Poder Judicial y lo consideró un hombre “íntegro, honorable, de bien, y de confianza”.
“Sí lo considero una gente honorable, de bien, me da confianza; si no, no lo diría. Y eso que está haciendo debe de tener el apoyo de los ciudadanos porque hay que limpiar el Poder Judicial”, comentó el titular del Ejecutivo.
Dijo que en caso de ser ciertos los depósitos hasta por 80 millones de pesos que recibió el magistrado destituido sí se justifica que sea sancionado.
López Obrador explicó que su salario anual ronda el millón 500 mil pesos al año y a lo largo de su sexenio podría obtener hasta ocho millones de pesos de salario.
“Miren cuánto gana el Presidente de la República: 108 mil pesos, al año un millón 200, eso si no gastara yo en nada. La verdad que no gasto mucho porque soy austero, miren, aquí está la cartera, no hay mucho”, ironizó el presidente López Obrador.
El titular del Ejecutivo realiza este fin de semana una gira de trabajo por Sinaloa y Baja California, para revisar la situación de hospitales rurales del IMSS.
Por otro lado, el Presidente insistió en que España debe “pedir perdón” por los “abusos” cometidos durante la Conquista de América, indicando que no debe ser considerado un tema “polémico”, sino un paso en favor de la “reconciliación”.