La extitular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Rosario Robles, pidió ante un tribunal federal que se le imponga justicia en el caso por ejercicio indebido público que enfrenta derivado de la “Estafa Maestra”.
Durante la audiencia de apelación ante el Magistrado Ricardo Paredes Calderón, titular del Quinto Tribunal Unitario en materia penal en la Ciudad de México, la ex funcionaria se presentó como “inocente”, tomó la palabra y destacó que no tiene intención ni cuenta con medios para darse a la fuga, por lo que pidió se revocara la prisión preventiva a la que está sujeta.
“Sólo pido algo a lo que tenemos derecho todos los mexicanos y las mexicanas: ¡Justicia!”, enfatizó.
“No hay razón para que se piense que yo podría sustraerme de la justicia (…) no tengo recursos para estar huyendo pero, sobre todo, no tengo el menor interés de hacerlo”.
Señaló que debido a que el sistema penal acusatorio es muy reciente en México, la sociedad no relaciona la prisión preventiva justificada como una medida cautelar sino como una pena, razón por la que se le está causando un daño “muy grave” al mantenerla recluida mientras se desarrolla su proceso.
A diferencia de cuando compareció por primera vez ante un juez de control en agosto pasado, Rosario Robles apareció maquillada y con el cabello teñido de negro, vistiendo un suéter delgado de cuello alto y pantalones capri del color beige reglamentario de los reclusorios y tenis blancos marca Nike.
En la diligencia, el abogado Epigmenio Mendieta indicó que el juez de control, Felipe de Jesús Delgadillo Padierna resolvió dos veces sobre la medida cautelar, lo que fue violatorio de los derechos procesales de Rosario Robles.
Esto, debido a que en la audiencia inicial celebrada el 8 de agosto la Fiscalía General de la República (FGR) dijo que no solicitaría ninguna medida cautelar para obligar a Robles a comparecer a la audiencia de vinculación el 12 de agosto.
El juez Delgadillo Padierna, recordó el abogado, calificó como inaudita esta actitud de la Fiscalía y que una vez que vinculó a proceso a Robles, en la madrugada del 13 de agosto, el juez requirió nuevamente a los fiscales para que solicitaran una medida cautelar.
“Me parece inaudito que un juez de control esté preocupado para, de manera inmediata, imponer una medida de prisión preventiva justificada”, precisó.
“No se puede hacer justicia cometiendo una injusticia”.
El magistrado Paredes Calderón indicó a las partes que agotará el término de tres días que la ley le confiere para decidir si Rosario Robles deberá o no permanecer en prisión preventiva.