Trata de blancas, violencia intrafamiliar y en el noviazgo así como el abandono gubernamental han convertido a la región del Istmo de Tehuantepec en territorio peligroso y no apto para las mujeres.
Según las estadísticas de algunos colectivos feministas de los 394 casos de homicidios registrados en los últimos tres años contra este sector, el 21 por ciento del total fueron cometidos en este punto de la entidad en donde existe una severa descomposición social.
La líder de la Coordinadora de la Fundación Restauración Nacional y en breve directora de la Instancia Municipal de la Mujer en Asunción Ixtaltepec, Celia Mendoza reconoció que la violencia se ha convertido en un grave problema en casi los 41 municipios que componen la región.
Juchitán, Tehuantepec, Matías Romero y Salina Cruz, son los Ayuntamientos catalogados como focos rojos debido a las altas cifras de mujeres asesinadas, problemática que ha sido normalizada por las autoridades no sólo federales sino también estatales.
“Encontrarse con cadáveres o la propia violencia intrafamiliar y del noviazgo ha sido normalizado en la región del Istmo de Tehuantepec”, agregó la líder quien además resaltó que la declaratoria de la Alerta de Violencia de Género ha sido inútil.
Lo anterior debido a que son los colectivos de mujeres feministas quienes se han encargado de generar estrategias para visibilizar la problemática y las autoridades se han deslindado de toda responsabilidad.
Las autoridades no han entendido que es a través de la concientización y prevención como se puede frenar todo tipo de violencia.
