Los estereotipos de género, que implican opiniones o prejuicios sobre supuestos atributos o características y funciones sociales que hombres y mujeres poseen o deberían poseer, favorecen la revictimización,principalmente de las mujeres, advirtió la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO).
El organismo autónomo alertó que la difusión de videos, fotografías y audios de conversaciones privadas y/o de hechos violentos cometidos contra mujeres, contribuyen a la criminalización de la propia víctima.
En fechas recientes, por redes sociales ha circulado información respecto a M.E.R., mujer agredida con ácido, que además de ser una invasión a su intimidad, vulnera sus derechos humanos y la agreden en el momento en el que ella y su familia se encuentran en búsqueda de justicia.
Este tipo de acciones —en las que se intenta corresponsabilizar a la víctima de su agresión—, forma parte de una cultura predominantemente machista que busca generar culpa en la víctima y disminuir el rechazo social hacia el hecho violento, con el objetivo de aislarla socialmente por medio de la estigmatización y el señalamiento para dificultar los procesos de recuperación y acceso a la justicia.
Mientras que, los estereotipos de género favorecen la revictimización de las mujeres que han sufrido violencia, ya que desde la cultura machista se corresponsabilizan y minimizan las agresiones.
La Defensoría señaló que estas visiones sociales y culturales están presentes tanto en los procesos de atención en las instituciones públicas, así como en la forma en la que se transmite la información a la sociedad, pues los discursos generados por los estereotipos en algunas ocasiones se reproducen en medios de comunicación.
Es por ello que el órgano autónomo plantea un cambio de paradigma que garantice a las víctimas la justicia sin señalamientos, estigmatización, filtraciones, ni corresponsabilidad en la violencia de la que fueron objeto.
La sociedad, enfatizó la DDHPO, debe aprender a preservar a la víctima en un espacio seguro, no culpabilizarla o poner en duda y por el contrario, brindarle un entorno seguro que permita que tengan una reparación integral.
Respecto al caso de M.E.R, la Defensoría dictó medidas cautelares a la saxofonista y su familia, en cuanto los medios de comunicación dieron a conocer la agresión en su contra, en el mes de septiembre de 2019.