De acuerdo con Reforma, Andrés Manuel López Obrador pasó “charola” a empresarios para comprometerlos a comprar boletos de la rifa para equipamiento médico.
En dicha cena se ofrecieron tamales de chipilín, que es un platillo tradicional chiapaneco. El chipilín es una planta silvestre que crece en lugares tropicales y con la masa de maíz se mezcla con queso y pollo, y se envuelve en hojas de plátano.
Junto con su tamal y chocolate, los 200 empresarios recibieron una carta para comprometerlos con pagos de 20, 50, 100 o 200 millones de pesos.
Quienes firmaron el documento, depositaron la papeleta en una tómbola de la Lotería Nacional que fue instalada en el Salón Tesorería de Palacio Nacional.
Algunos de los firmantes del compromiso fueron Bosco de la Vega, presidente del Consejo Nacional Agropecuario; Carlos Bremer, director de Grupo Financiero Value, y Miguel Rincón, dueño de Bio Pappel y compadre de López Obrador, pero rechazaron revelar cuánto dinero comprometieron.
El Presidente fue muy claro: esto es voluntario, les agradezco que hayan venido, este es un compromiso que cada uno puede tomar, decidir y plasmarlo aquí, nadie está obligado, dijo, porque los empresarios ya cumplen con el pago de impuestos”, detalló Rincón.
Francisco Cervantes, presidente de concamin, reveló que se analiza la posibilidad de que las empresas donantes reciban el beneficio de la deducción de impuestos.
Durante la cena, López Obrador defendió la venta del avión TP-01, mientras que el titular de Banobras, Jorge Mendoza, detalló la ruta que se seguirá para efectuar el sorteo de septiembre para la compra de equipo médico.
“El planteamiento fue una idea de austeridad, por eso se está vendiendo el avión, y lo que se va a hacer es usar recursos para apoyar los programas de gobierno con equipos para los hospitales”, detalló Carlos Slim, presidente de Grupo Carso.
Niega AMLO que cena con empresarios fuera “pase de charola”
Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, aseveró que no es un “pase de charola” la solicitud que hizo a los empresarios para apoyar la rifa del avión presidencial.
El mandatario externó que los empresarios “voluntariamente están ayudando”, aunque se negó dar una lista de quienes asistieron a la cena del miércoles pasado en Palacio Nacional.
“Es totalmente legal, no es para beneficio personal, es para el beneficio social. no hay ningún problema. es inconcebible que hiciéramos algo contrario a la ley y en beneficio personal, si estamos hablando de que lo que se obtenga de la rifa es para la compra de equipos médicos”, externó.
Decir que fue muy buen encuentro, hay que repetirlo. Se portaron muy bien (los empresarios), que les agradecemos por participar, por acudir a la convocatoria porque no es un asunto obligatorio, ellos contribuyen, pagan sus impuestos y con eso el gobierno tiene presupuesto para atender las demandas de los ciudadanos”, apuntó.
“Que les pregunten (a los empresarios) si hubo una insinuación para que fuese ‘a forsiori’. Se equiparó con el pase de charola, pero esto es totalmente de buena fe, no es obligatorio, es voluntario”, aclaró.
El mandatario mexicano apuntó que es mejor usar las líneas comerciales a que se gasten 200 millones de pesos año en mantener el avión presidencial.
“Es mejor que el presidente pague su boleto en una línea comercial, que lo que cuesta mantener ese avión sin volarlo, son más de 200 millones de pesos al año. ¿Creen que yo voy a gastar 200 millones en boletos con los que me acompañan? No, es sentido práctico”, argumentó.
Con información de Reforma