* Sabedor el Gobierno del Estado de la mano negra que mecía la cuna de la violencia, mediante bloqueos de cruceros estratégicos y de las instalaciones del INEGI, equivocadamente concluyeron: “Salomón lo trajo, que él se los lleve”. El legislador quiere crecer en esa zona en la que le hace contrapeso el ex porro de la UABJO Freddy Gil Pineda Gopar.
* Dado el creciente y fortalecido sospechosismo, no podemos dejar de malpensar que el Ombudsperson no quiere confrontarse con el Vicepresidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores Salomón Jara, en abierta campaña por la Gobernación del Estado.
Educado en la vieja escuela del honor y la lealtad de las instituciones nacionales, es mi profunda convicción ser leal hasta como enemigo, cuando es estricta e indispensablemente necesario.
Bajo ese código de honor, que rige mi vida, jamás regateo méritos a nadie, ni a mis enemigos. La lealtad es el todo y la fidelidad una mínima parte. Fieles son los animales, leales, las personas.
De ahí que entre los cientos, quizás miles, de familiares, amigos, y seguidores en Twitter a los que leo en las redes sociales, figuran colegas columnistas locales, nacionales e internacionales.
Al lado de distinguidas compañeras como María de los Ángeles Nivón, Rebeca Romero, Rosy Ramales, Lupita Thomas, Soledad Jarquín, destacan amigos y hermanos como Raúl Nathan.
A ellos se suman, Narciso Reyes, Felipe Sánchez, Humberto Torres, Roberto Molina, Pablo Ramírez, Horacio Corro, Cuauhtémoc Blas, Betillo Cruz, Jaime Velásquez y Alfredo Arenas, entre otros.
Todos, hombres y mujeres, son valores locales de obligada lectura. Juan Pérez Audelo (@nathanoax) twitteó a las 4:49 p. m. on lun., mar. 02, 2020 a @OaxPress @SEGEGO_GobOax @MexRoja @efektoaguila: “Que alguien me explique: ¿Cuál es el motivo o razón, de apatía, parálisis, debilidad institucional o terror de autoridades para aplicar la ley, ante casos evidentes de atropellos a derechos civiles? Diez horas de bloqueo. Ahí seguimos”.
Desde mi cuenta @efektoaguila fui por el guante lazado puntillosamente por mi estimado @nathanoax e intentando una respuesta escribí: “Somos un pueblo de cobardes indolentes, apáticos, indiferentes y cómplices con nuestro silencio. Hasta ahora, lamenté, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) hace mutis”.
Efectivamente, a diferencia de otras ocasiones, de manera por demás extraña e inexplicable el Ombudsperson Bernardo Rodríguez Alamilla, guardó silencio cómplice ante la toma por asalto de la capital por las hordas de Santa María Colotepec, manipuladas por el senador Salomón Jara.
Según logramos establecer, reportes de inteligencia informaron: “El vocero del Senado de la República Salomón Jara @salomonj mandó a Carmelo Cruz Mendoza, Presidente Municipal de Santa María Colotepec a bloquear la ciudad capital, con bandera falsa para que lo siga la gente”.
Vehículos oficiales, como patrulla, utilizaron habitantes de Santa María Colotepec para bloquear calles en la capital oaxaqueña. Son encabezados por su edil, profesor Carmelo Cruz Mendoza.
Sabedores en Gobierno del Estado de Oaxaca de la mano negra que mecía la cuna de la violencia, mediante bloqueos de cruceros estratégicos y de los accesos a las instalaciones del INEGI, equivocadamente concluyeron: “Salomón lo trajo, que él se los lleve”. El legislador quiere crecer en esa zona en la que le hace contrapeso el ex porro de la UABJO Freddy Gil Pineda Gopar.
Dado el creciente y fortalecido sospechosismo sobre las manos negras de actores de ayer y de hoy que mecen la cuna de la violencia política, un día sí y otro también, no podemos dejar de malpensar que el Ombudsperson no quiere confrontarse con el Vicepresidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores, en abierta campaña por la Gobernación del Estado.
En el cruce de mensajes de la conversación cibernética en Twitter terció nuestro amigo CG (@GomezCarlos09) twitteó a las 10:36 a. m. on mar., mar. 03, 2020: “Con todo respeto maestro, considero es la incapacidad de gobernar, la falta de oficio político para operar y solucionar conflictos, la falta de atención y, sobre todo, la ingobernabilidad que se vive en Oaxaca y que cualquier pendejo venga hacer lo que le dé la gana y no pase nada”.
Sin el menor ánimo de pontificar, respondí: “La ciencia política enseña desde las leyes naturales, a través de la Teoría del Caos que hay que sembrar el terror, para manipular y controlar a los pueblos o naciones, mediante conflictos prefabricados, como en México y Oaxaca; de ahí que la inseguridad y violencia es provocada y controlada desde los diversos órdenes de Gobierno”.
James Gleick, escritor, periodista y biógrafo., explora en sus libros las ramificaciones culturales de la ciencia y la tecnología, y narra el desarrollo de la Teoría del Caos, un best-seller internacional en el que hizo del “efecto mariposa” algo conocido para el público en general.
Glieck sintetiza la teoría: “Durante las décadas pasadas, físicos, biólogos, astrónomos y economistas han creado una nueva forma de entender el crecimiento de la complejidad en la naturaleza”. Esta nueva ciencia, llamada Caos, brinda una forma de ver orden y regularidad donde antes sólo lo aleatorio, lo errático, lo impredecible –en suma, lo caótico-había sido observado”.
Desde su dirección @cuartaplana el portal del mismo nombre precisó en un tuit: “Son 20 trabajadores, entre ellos una mujer, y dos elementos de seguridad, quienes están secuestrados en las oficinas del @INEGI_INFORMA, por habitantes de Colotepec”.
En las primeras horas de la noche, los trabajadores del Instituto Nacional de Geografía e Informática enviaron a las redes sociales un desesperado llamado de auxilio:
“A las autoridades municipales, estatales y federales, Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca y la CNDH: Personal del INEGI llevan más de 12 horas privados de libertad en las instalaciones del mismo Instituto Emiliano Zapata en la Col Reforma en Ciudad de Oaxaca, por vecinos de Colotepec. Se solicita liberarlos son 30 personas, de las cuales 15 mujeres; no se les permite comer”. Presuntamente, los mandó el senador de Morena Salomón Jara Cruz.
@efektoaguila