* No se permitirá velación de cuerpos, para evitar contagios; los cadáveres serán incinerados
El destino final de cuerpos de personas que mueran por COVID-19 confirmados o sospechosos, será la inhumación o cremación y no se permitirá su velación en velatorios ni en domicilios particulares para evitar un riesgo de infección.
En Oaxaca, la mayoría de fieles de la iglesia católica, acostumbra a velar en sus viviendas el cuerpo de sus familiares muertos, además de bendecir el féretro, teniendo acceso los más cercanos a ver el cuerpo antes de su entierro.
Hay familias que contratan bandas de música, mariachis o agrupaciones musicales especiales que amenizan las velas, durante los rezos, para hacer más llevadero el duelo.
Los Servicios de Salud de Oaxaca informaron que los nuevos lineamientos fueron publicados el 8 de abril en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado, según acuerdo para el manejo seguro, traslado y disposición final de cadáveres por COVID-19.
Por la contingencia sanitaria, lo que es parte de la tradición y costumbre de cientos en Oaxaca, no será posible, las autoridades señalaron que lo que se busca es evitar un riesgo de infección y transmisión de enfermedades para las personas asociadas con el manejo y disposición final del cadaver.
Los Servicios de Salud informaron que el cadáver se introducirá en una bolsa sanitaria, con cierre hermético y plastificado, que se realizará dentro de la habitación de aislamiento, una vez cerrada se rociara en su totalidad con desinfectante de uso hospitalario y colocar una ficha al frente de la bolsa con los datos de identificación de la persona fallecida.
Detallaron que el féretro no deberá manipularse en la bolsa sellada y el personal que intervenga tiene que estar debidamente capacitado y contar con el equipo de protección personal. No se podrá realizar el embalsamiento.
La bolsa sanitaria que contenga el cuerpo podrá introducirse al féretro normal y el destino final será inhumación o cremación. No se permitirá el contacto con el cadáver, ni su visualización y deberá estar en el féretro sellado.
La institución detalló que a las personas muertas por COVID-19 no se realizarán autopsias, fueran clasificadas como probables o confirmados, salvo indicaciones clínicas o por orden de alguna autoridad competente.