*Los habitantes preocupados por la salud pública solicitaron la intervención de las autoridades para que tomaran cartas en el asunto, pero fueron ignorados
Agencia JM
El 21 de mayo en curso, integrantes del comité vecinal del sector El Arenal, advirtieron al presidente municipal de San Sebastián Tutla, al secretario de Salud Estatal y al titular de la SEMAEDESO, de la existencia de un crematorio “clandestino”, pero fueron ignorados.
Conscientes de que el establecimiento no se encuentra en jurisdicción de San Sebastián Tutla, sino del municipio vecino de Tlalixtac de Cabrera, los habitantes preocupados por la salud pública solicitaron la intervención de las autoridades referidas para que tomaran cartas en el asunto.
Constantemente se veía el paso de carrozas que transportan cadáveres humanos en distintos horarios, principalmente por la noche.
De acuerdo al escrito de solicitud, el 17 de mayo aproximadamente a las nueve de la noche, varios vecinos se reunieron para comprobar el ruido del horno parecido al de una caldera en operación sobre la avenida Ferrocarril, en un inmueble marcado con el número 115, adelante de un puente y a un costado del río La Venta, entre los límites jurisdiccionales de Tutla y Tlalixtac.
Los vecinos decidieron vigilar el movimiento que se tenía en ese lugar durante el día y constataron la llegada de varias carrozas que entran a dejar los cadáveres que transportan, y por la noche se pone en operación el crematorio, causando mucho ruido, emisiones fétidas, y partículas de cenizas suspendidas en el aire, según las evidencias recabadas por los vecinos.
En consecuencia, los vecinos exigen la suspensión de actividades de dicho crematorio a la brevedad, la clausura o retiro definitivo, y exhortan a las autoridades a privilegiar la salud de la comunidad, en virtud de la contingencia sanitaria por la pandemia del COVID 19 coronavirus.