La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció este lunes la suspensión “temporal” de los ensayos clínicos con hidroxicloroquina que realizaba en varios países, como medida de precaución.
Esta decisión se debe a la publicación de un estudio el viernes en la revista médica The Lancet que considera ineficaces y hasta contraproducentes la cloroquina y sus derivados como la hidroxicloroquina para luchar contra la COVID-19, dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Según el artículo, el medicamento hidroxicloroquina, que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, consume para mantener a raya al coronavirus (COVID-19), se relacionó con un mayor riesgo de muerte en comparación con aquellos que no recibieron el tratamiento, en un estudio realizado en 96 mil pacientes con esta enfermedad.
Los autores del estudio dijeron que no podían confirmar si tomar hidroxicloroquina producía beneficios en pacientes infectados.
Efectos secundarios del medicamento
Personas tratadas con Hidroxicloroquina o Cloroquina tienen más probabilidades de sufrir ritmos cardíacos rápidos y anormales (arritmias ventriculares) que sus contrapartes que no recibieron medicamentos. Mandeep R. Mehra, del Hospital Brigham and Women’s, señaló en el texto: “Vimos una cuadruplicación en la tasa de arritmias ventriculares significativas en pacientes con COVID-19”.
Cada uno de los regímenes farmacológicos se asoció con un aumento en el riesgo de arritmia ventricular. Advirtieron que el estudio actual es de naturaleza observacional: no puede responder a la pregunta de si con la Hidroxicloroquina o Cloroquina fueron los únicos responsables de los cambios en la supervivencia. Los ensayos clínicos continuarán.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó en días pasados que utilizaba la Hidroxicloroquina como medida de prevención contra el COVID-19, mientras el mandatario de Brasil, Jair Bolsonaro, recomienda los medicamentos para tratar a pacientes con síntomas leves del coronavirus en su país.