En Querétaro fue donde más se disparó el precio del botiquín, 50.4% en junio frente al mismo mes del año pasado. Le siguió Tabasco, con 47.9%, y Durango, con 36%, indica la cotización del Inegi de material de curación, cuya lista incluye alcohol, algodón, jeringas, gasas y nueve productos más.
Los antibióticos también reportaron grandes aumentos, siendo Nayarit la entidad más afectada, con alza de 19%; continuando con Estado de México, donde se elevaron 17.8%, y Morelos, con 13.5%.
Los analgésicos subieron más en Guanajuato, 15.2%; en segundo sitio aparece Yucatán, con 14.2%, y en tercero Sinaloa, con 13.5%.
Con la mayor población del país, el Estado de México registró el aumento más pronunciado en medicamentos para diabetes, 20.6%.
En Campeche se encarecieron más los antiinflamatorios, 14.7%, y en Tabasco, donde principalmente lo hicieron los antigripales, 14%.
En Baja California Sur destaca el repunte de 64.2% en medicamentos para alergias, casi 13 veces arriba de la media nacional, de 5.1%.
En la Ciudad de México se registraron incrementos moderados.
La irrupción del Covid-19 en toda la cadena de fabricación y distribución está detrás del mayor precio en medicamentos, expuso Jesús Granados Campos, presidente del sector de fabricantes de dispositivos médicos y material de curación de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra).
Los laboratorios dependen de las materias primas del extranjero, principalmente de China, donde la producción se frenó para contener la pandemia, situación que ocasionó un incumplimiento de entregas y la escasez de productos.
Además, muchos fármacos que se venden en la actualidad se importaron hace dos o tres meses, cuando el dólar se intercambiaba en más de 25 pesos.
“El traslado de insumos al país, la logística y el desaduanamiento, son costos que se deben cubrir en dólares o euros”, explica Granados en entrevista con EL UNIVERSAL.
En México se les restringieron salidas a transportistas por la emergencia sanitaria, lo que sube los envíos de medicamentos.
Los costos también se elevaron por el peaje, seguros de transporte y la contratación de servicios privados por la inseguridad.
El incremento que reportó el Inegi es pequeño, considerando las dificultades para hacer llegar medicamentos al consumidor final, opina el integrante de la Canacintra.
Desde su punto de vista como productor, algunos vendedores finales pudieron especular y subir el precio a medicamentos ante la demanda inusual por la pandemia.
En su opinión, el alza llega a su fin, debido a que las fábricas en China han reanudado operaciones, y el envío de materia prima y producto se está normalizando.
Sin embargo, después de subir, el producto tiende a bajar de precio en un periodo y magnitud que dependerá de la demanda y producción, para lo que el tipo de cambio de 23 pesos por dólar luce alto.