La decisión del PAN de presentar como suya la propuesta que prepararon empresarios con la Secretaría de Hacienda para acordarla con el sector obrero, a fin de mejorar el sistema de Afores y garantizar una pensión mínima a los trabajadores, provocó un cisma en el grupo de negociación, porque el sector obrero planteó que no va con la iniciativa del PAN y mantiene su posición de desaparecer las cuentas individuales.
El domingo, el presidente nacional del PAN, Marko Cortés, presentó como propia una propuesta de reforma para que un aumento de cotización del 6.5% al 15% sea absorbido totalmente por los patrones y se implemente de manera gradual, en un periodo de transición de ocho años.
Incluye reducir de mil 250 semanas de cotización, equivalentes a 24 años de trabajo, a 750 semanas de cotización, iguales a 14 años laborales, para acceder a una pensión mínima garantizada, a fin de beneficiar al 30% de trabajadores que se mueven entre la formalidad y la informalidad a lo largo de su vida.
Además, la propuesta busca ampliar la red de protección para los trabajadores, lo cual significa que quienes ganan hasta cinco salarios mínimos vean un incremento sustancial en sus pensiones y no queden desprotegidos.
Pero la propuesta no es del PAN, sino que la trabajaron entre la Asociación Mexicana de Afores (Amafore), con el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y la Secretaría de Hacienda y se comenzaba a trabajar con el sector obrero, a quien intentan convencer de no desaparecer las Afores.
Sin embargo, el hecho de que PAN la haya presentado como suya rompió el consenso con la clase obrera, que ratificó su propuesta de eliminar las cuentas individuales, luego de conocer que el PAN impulsaba la reforma, que originalmente les presentaron los empresarios.
Ayer, Excélsior informó que el sector obrero impulsa una nueva ley del sistema de pensiones en que las ganancias por los portafolios de inversiones se vayan directo a los ahorros de los trabajadores y no se queden en ganancias de las administradoras, de acuerdo con Isaías González, líder de la CROC.
De acuerdo con información obtenida por Excélsior con los legisladores que han conocido del desarrollo de las pláticas, la propuesta que se trabajaba ya contaba con un visto bueno del gobierno federal, a través de la Secretaria de Hacienda y comenzaba a vencer la posición inicial del sector obrero de desaparecer las Afore.
El plan era que la propuesta pudiera avalarse por la CTM, que es la mayor central obrera del país y la única que tiene presencia en absolutamente todo el territorio nacional; CROC y la nueva agrupación impulsada por el gobierno de Morena, la CATEM. Las pláticas estaban avanzadas y una vez concluida esa etapa si iba a presentar al presidente Andrés Manuel López Obrador, para que el Ejecutivo Federal pudiera presentarla el Poder Legislativo de manera oficial.
Pero el PAN, que conoció la propuesta la semana pasada, decidió presentarla como propia este domingo y eso cimbró los acuerdos, al grado de que Carlos Aceves del Olmo, dirigente de la CTM y del Congreso del Trabajo, explicó a este diario que, en efecto, hay una mesa de negociación, pero los cetemistas dan prioridad ahora a otros temas.
Planteamiento
El domingo, el presidente del PAN, Marko Cortés, propuso un aumento de cotización del 6.5% al 15%, pagado por los patrones.