-También pelean botín de 59.9 mdp en dirigencia estatal
Sin duda al interior del Movimiento de Regeneración Nacional en Oaxaca andan bastante inquietos, las elecciones federales del 2021 los trae muy movidos y los cambios en la dirigencia nacional, donde está más que palomeado el presidente de la Jucopo en San Lázaro, Mario Delgado Carrillo, les ha generado nerviosismo.
De entrada, los 15 diputados locales que pertenecen al grupo del senador Salomón Jara Cruz, férreo aspirante a la gubernatura de Oaxaca, preparan ya sus campañas para reelegirse, aun cuando el presidente de la Jucopo, Horacio Sosa Villavicencio no se descartó en esa posibilidad y trató de evadir la pregunta, hoy fuentes al interior de Morena confirman que sí van por la reelección.
Lo mismo con el grupo de diputados federales, aunque no todos estarían en la posibilidad de lograrlo, quienes han sido palomeados por Jara Cruz son Irineo Molina Espinosa, quien en un principio traía serias diferencias con el senador, hoy alcanzaron acuerdos, aunque el legislador también aspira a la Presidencia Municipal de Tuxtepec, pero no es nativo de ahí, está buscando cuál de las dos alternativas le cuaja.
En busca de la reelección con la venia de Salomón Jara están también Irma Juan Carlos, María del Carmen Bautista Peláez, Azael Santiago Chepi, Beatriz Dominga Pérez López y Rosalinda Domínguez, aunque faltaría ver si les alcanza para ganar la elección, insistimos, no vendrá AMLO en la boleta.
El plan político-electoral es allanarle el camino a Jara Cruz para la gubernatura de Oaxaca, a pesar de todos los negativos que trae y que poco le importa, ya se preparan los diversos escenarios para la gran encuesta que será el método por el que Morena, según indicaciones del presidente Andrés Manuel López Obrador, se definirá al candidato o candidata a la grande, la joya de la corona.
Primero es la “democracia”, “lo que diga el pueblo”, “si el pueblo lo manda”, ellas y ellos serán reelectos.
Teniendo a la mayoría de las y los diputados en la futura 65 Legislatura del Congreso del Estado y luego de haber alcanzado acuerdos con Sesul Bolaños, actual líder estatal de Morena, con quien también eran enemigos políticos, ha iniciado la operación cicatriz. Ahora ambos caminan de la mano impulsando una consulta “patito” para enjuiciar a ex presidentes de la República.
Aunque en la consulta no se paran ni las moscas.
El jugoso presupuesto que maneja el partido Morena en Oaxaca es muy alto, reciben $59,935,708.7 anuales y $4,994,642.39 mensuales, recursos que los trae enfrascados en un gran pleito interno por el botín.
Por ejemplo, el grupo contrario de diputados federales y estatales a Jara Cruz, comandados por Armando Contreras, son quienes le movieron el tapete a Sesul Bolaños para que la ex secretaria de finanzas de Morena, Elsa Martínez Luis, lo denunciara por violencia política de género, que por supuesto no es justificable, si es que lo hizo, insultar a una dama de esa forma con palabras altisonantes y discriminatorias.
El fondo del pleito interno en la dirigencia de Morena, es el dinero, no es para menos, nadie sabe dónde están los $140,000,000.00 de pesos que supuestamente manejaron y que es el supuesto reclamo que Sesul Bolaños pide que se transparenten a su exsecretaria de finanzas, Elsa Martínez solo que no es con insultos como lo va a lograr, para ello están las vías legales. Las mujeres merecen respeto.
No hay nada para nadie todavía, el único que va a decidir quién será el o la candidata a la gubernatura por Oaxaca es AMLO, nadie más, pero el Presidente es bastante astuto, ya midió a Salomón Jara, sabe que no la trae todas consigo a pesar de recorrer los 570 municipios y darle la vuelta dos veces, no termina de cuajar, los negativos son muchos, y ni siquiera le ha puesto atención, está muy seguro que nadie se la gana.
En cuanto a la senadora Susana Harp Iturribarría, quien regresó a ocupar nuevamente su escaño en el Senado de la República, sería la más fuerte contrincante internamente para Jara Cruz, la que también ya ha sido medida por López Obrador al darle la responsabilidad de la pandemia del covid en Oaxaca y terminó regresando a la cámara alta.
Mientras que por el lado del Partido del Trabajo, está el diputado federal Benjamín Robles Montoya, que también ha levantado la mano y confía en los amarres de su dirigente nacional, Alberto Anaya con López Obrador, también confiaba en que se abriera la posibilidad de que los petistas se quedaran con la mesa directiva en el Congreso Federal, pero no es así.
De los demás que se mencionan como Adelfo Regino Montes y hasta Francisco Martínez Neri, no tienen internamente en Morena ninguna posibilidad, al primero le quitaron casi todo el presupuesto en el INPI; al segundo, AMLO no le perdona que se haya unido a Morena cuando ya habían ganado la Presidencia de la República, es decir, se decidió muy tarde, por ello quizás Neri sería candidato pero para la alcaldía capitalina, por ahí quieren empujarlo.
Ahora, del grupo de diputados federales contrarios a Jara Cruz, comandados por Armando Contreras, en donde figuran Carol Antonio Altamirano, Daniel Gutiérrez Gutiérrez, también pretenden reelegirse, ninguno quiere soltar el hueso, ni tampoco darle la oportunidad a otros cuadros políticos, y ese puede ser también uno de los desencantamientos de la ciudadanía hacia las propuestas morenistas.
Así estarían internamente los planes y amarres en Morena-Oaxaca, ya falta muy poco para el arranque del proceso electoral, donde al igual que la pandemia de covid-19, sobrevivirán los más fuertes, ¿o más astutos?
PRESIDENCIA DE MESA DIRECTIVA EN SAN LAZARO, NI PARA DIOS NI PARA EL DIABLO
Ni para Dios, ni para el diablo.
Así quedó en suspenso anoche la presidencia de la mesa directiva de la 64 Legislatura Federal en San Lázaro, donde a pesar de que el PRI logró “comprar” a cuatro legisladores del PRD (Antonio Ortega Martínez, Jesús de los Ángeles Pool Moo, Guadalupe Almagur Pardo y Abril Alcalá Padilla) para alcanzar 50 curules y convertirse en la tercera fuerza, se quedaron en el camino al igual que el petista Gerardo Fernández Noroña.
Aunque este último vocifere que está como presidente en el corazón del pueblo de México, lo cierto es que no alcanzaron la mayoría calificada que por reglamento se requería, la votación final fue de 278 votos a favor, 64 abstenciones y 112 en contra, por ello la mesa directiva actual seguirá vigente hasta el 5 de septiembre en que la cámara federal vuelva a sesionar de manera ordinaria.
Estuvo buena la rebatinga que protagonizaron los petistas y priistas por la mesa directiva en San Lázaro, finalmente terminaron exhibiendo sus miserias, de lo que realmente están hechos y los perredistas al venderse, ni se diga, solo que quienes más perdieron fueron los del PRI porque de nada les sirvió gastar la lana para convencer a los cuatro del PRD para pasarse a su grupo parlamentario, si al final no les cuajó la jugada.
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