* En un desplegado, poetas, científicos, artistas, escritores, académicos, intelectuales, periodistas, cineastas advierten que el presidente Andrés Manuel López Obrador «pretende socavar la libertad de expresión en México».
* El ministro en retiro José Ramón Cossío, señala que el clima de polarización se enfatiza con los señalamientos que el Presidente hace contra determinadas personas o empresas de comunicación y pone en riesgo a los periodistas.
(A mi amigo-hermano profesor Guillermo Jorge “El Gallo” Castillejos Ávila, periodista de la vieja guardia, siempre amable y atento, quien permanece intubado en el Hospital General de Zona 1 del IMSS. Un abrazo fraterno y solidario a su esposa hijas e hijos. Clamamos al Todopoderoso por su salud.)
Al igual que en el viejo PRI del gobierno populista de Luis Echeverría, enemigo de las libertades, hoy en el PRIMOR está en grave riesgo la libertad de expresión por los ataques del gobierno neo populista de la 4T.
Ayer y hoy, a uno y otro régimen molestan, incomodan e indignan, las denuncias de los abusos del actual autoritarismo despótico en los medios de comunicación en general y, particularmente en la prensa.
A ello se suman los permanentes atentados y asesinatos de la delincuencia organizada y los cárteles del narcotráfico contra los periodistas y los medios de comunicación a lo largo y ancho del territorio nacional.
Y en Oaxaca las frecuentes agresiones a reporteras como Melina Hernández, de El Imparcial, quien fue golpeada y sufrió daños patrimoniales por feministas en una marcha contra la violencia hacia ese género.
Al condenar la agresión a la reportera, Luis Ramírez Hernández, dirigente del Foro Nacional de Periodistas y Comunicadores, Capítulo Oaxaca, exigió mayores garantías a los gobiernos federal, estatal y municipales.
Dijo que el Foro siempre ha rechazado todo tipo de violencia contra las mujeres. Por eso, en nuestro ejercicio periodístico diario, nos hemos unido a la lucha por los derechos plenos para las mujeres.
Demandó garantizar el derecho a la información y la libertad de expresión al presidente Andrés Manuel López Obrador, al gobernador Alejandro Murat, al Congreso del Estado, a la Fiscalía y a la Defensoría de los Derechos Humanos.
Cada día se le enredan más las pitas entre las manos al presidente Andrés Manuel López Obrador y todos los días abre nuevos frentes de batalla, ora se trate de feministas que demandan justicia ora de la prensa.
Con esta actitud patológica de buscar permanentemente la polarización López Obrador divide y enfrenta a todos contra todos para que se le facilite gobernar, a través de imponer el terror a todos los mexicanos.
No obstante, sus millones de seguidores cada día suman más millones de adversarios críticos, que no enemigos a los que, ahora, se suman cientos de científicos e intelectuales, sus familias, amigos y fans.
Pierde la soberbia al gobernante que hizo resurgir la esperanza de cambio real en 30 millones de mexicanos que votaron por él en su tercer intento por ganar la presidencia, lo que finalmente consiguió.
Incurre así en el error que han cometido los grandes conquistadores, como Napoleón Bonaparte y Adolfo Hitler: abrir muchos frentes de batalla al mismo tiempo, lo que finalmente facilita su estrepitosa derrota.
En un desplegado, poetas, científicos, artistas, escritores, académicos, intelectuales, periodistas, cineastas advierten que el presidente Andrés Manuel López Obrador «pretende socavar la libertad de expresión».
Los más de 650 firmantes manifiestan en el documento «En defensa de la libertad de expresión» que hoy en México la libertad de expresión está bajo asedio y que con ello «está amenazada la democracia».
Los firmantes denuncian que el presidente Andrés Manuel López Obrador utiliza «un discurso permanente de estigmatización y difamación contra los que él llama sus adversarios» y avienta a sus leones.
Subrayan que con ello «agravia a la sociedad, degrada el lenguaje público y rebaja la tribuna presidencial de la que debería emanar un discurso tolerante».
«Sus palabras son órdenes: tras ellas han llegado la censura, las sanciones administrativas y los amagos judiciales a los medios y publicaciones independientes que han criticado a su gobierno. Y la advertencia que la opción para los críticos es callarse o dejar el país».
Ante la amenaza real traducida en asedio permanente a la libertad de expresión en México hacen un enfático llamado, «Esto tiene que parar», y recalcan que el Presidente lanza juicios y propala falsedades que siembran odio y división en la sociedad mexicana.
Las palabras del ministro de la Suprema Corte en retiro José Ramón Cossío Díaz, refuerzan la denuncia de los intelectuales y científicos al advertir que, actualmente, en México hay un ambiente de polarización
El jurista señala que el clima de polarización se enfatiza con los señalamientos que el Presidente hace contra determinadas personas o empresas de comunicación y puede poner en riesgo a los periodistas.
Afirma que cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador realiza una confrontación de hechos, noticias o información publicada, es un verdadero ejercicio a la libertad de expresión, lícito y legítimo.
Pero cuando el presidente López Obrador se confronta con los medios de comunicación, académicos o líderes de opinión, es un atentado, dice el ministro de la Suprema Corte en retiro José Ramón Cossío Díaz.
En una apretada síntesis, el documento describe que el Presidente ha despreciado la lucha de las mujeres y el feminismo, despreciado el dolor de las víctimas por la violencia, ignorado los reclamos ambientalistas.
Ha lesionado presupuestalmente a los organismos autónomos, humillado al Poder Judicial, golpeado a las instituciones culturales, científicas y académicas y, ahora, busca socavar la libertad de expresión.
«Recordemos, por último, que no se estigmatiza a personas físicas o morales desde el poder presidencial sin ponerlas en riesgo. No se alimenta el rencor desde esa tribuna, sin que el odio llegue al río alguna vez».
La carta está firmada por más de 650 personas, entre éstos Javier Sicilia, Enrique Krauze, Arturo Ripstein, Enrique Serna, Antonio Lazcano, Gabriel Zaid, Agustín Basave, Álvaro Uribe y Ángeles Mastretta.
Otros firmantes son Arnaldo Kraus, Claudio X González, Enrique Florescano, Héctor Aguilar Camín, Julia Tagüeña, Silvia Lemus, Carmen Boullosa, Homero Aridjis, Roger Bartra, Ricardo Pascoe, Rafael Pérez Gay y Héctor de Mauleón.
Rubén Aguilar Valenzuela, Sara Sefchovich, Raúl Padilla, Paulina Lavista, Mónica Lavín, Raúl Trejo Delarbre, Sergio López Ayllón, José Antonio Crespo, entre otros muchos. Los responsables de la publicación son Roger Bartra y Francisco Valdés Ugalde.
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