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Por tercera ocasión en un mes, el gobernador de Tabasco, el morenista Adán Augusto López Hernández, reprochó a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) “esa insensibilidad e irresponsabilidad (con las que) inundaron Nacajuca, Jalpa y Cunduacán, y advirtió a su director, Manuel Bartlett Díaz: “Vamos a presentar denuncias y demandas para que indemnice a los tabasqueños que resultaron damnificados y repare la infraestructura dañada o destruida”.
Desde la víspera el mandatario estatal manifestó su inconformidad porque el Comité Nacional de Grandes Presas propuso aumentar la extracción del embalse Peñitas a 950 metros cúbicos por segundo, sin avisar al gobierno estatal para que participara, como habían acordado.
Este miércoles el Ejecutivo local reiteró su queja luego de que la empresa productiva del Estado difundió un boletín en el cual aseguró que de toda el agua fluvial que escurre hacia Villahermosa, 73 por ciento no tiene control alguno y sólo 27 por ciento proviene del sistema de presas del Grijalva.
La controversia entre el gobierno de Tabasco y la CFE se inició en la primera semana de octubre, con las primeras inundaciones de este año en Tabasco, y ayer por la tarde se agudizó cuando el gobernador endureció sus reclamos tras conocer la respuesta que dio la CFE a sus señalamientos del martes.
Tras esa ocasión, el presidente Andrés Manuel López Obrador visitó la zona para reconocer que hubo un mal manejo del desfogue y prometió un nuevo plan para la presa a fin de evitar más inundaciones.
La CFE recordó que el pasado 29 de octubre refrendó las medidas de seguridad establecidas en las presas Malpaso y Peñitas, y mantuvo el almacenamiento de esta última en su nivel mínimo de operación de 85 metros sobre el nivel del mar, así como una guardia permanente.
Destaca que se vigila de cerca la evolución de la presa Peñitas, aplicando la política de operación vigente con la Comisión Nacional del Agua. Además, se supervisa estrictamente la evolución del desplazamiento del frente frío semiestacionario número 11, de la masa de aire frío en la cuenca y del ingreso de aire húmedo proveniente del Mar Caribe, para mantener el control de la presa.
En Twitter, el gobernador se dirigió a Bartlett Díaz para aclararle que “los tabasqueños nunca hemos dicho que el manejo irresponsable y mercantilista con que la CFE opera la extracción de la presa Peñitas haya causado inundaciones en Villahermosa. Lo que sí afirmamos es que con esa insensibilidad e irresponsabilidad inundaron Nacajuca, Jalpa y Cunduacán y vamos a presentar denuncias y demandas para que la CFE indemnice a los tabasqueños que resultaron damnificados y repare la infraestructura dañada o destruida”.
Por la mañana, en la reunión del Comando de Coordinación Técnica Hidráulica para dar a conocer la instalación de seis dragas de succión para ayudar a desalojar agua en varios municipios del estado, López Hernández se refirió al tema de la presa Peñitas.
Mencionó que la Comisión Nacional del Agua les reiteró que “el desfogue de Peñitas no afecta a Villahermosa ni al resto del municipio de Centro (pues) la compuerta de Macayo está funcionando correctamente y los canales de alivio están operando a su máxima capacidad”.
Fuente: La Jornada
