Los visones y humanos infectados con esta cepa del virus mostraron una sensibilidad reducida a los anticuerpos, lo que podría reducir la eficacia de las vacunas que se preparan a nivel mundial.
Frederiksen señaló que existe el riesgo de que este virus se propague de Dinamarca a otros países.
Dinamarca compartió sus hallazgos con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y con el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés).
Los visones son pequeños mamíferos de la familia de los mustélidos, a la cual pertenecen los hurones, las nutrias y las comadrejas.
Desde junio, el país europeo comenzó a sacrificar animales infectados. No obstante, los brotes del virus en las granjas de visones han persistido.
La policía, armada y la guardia nacional de Dinamarca serán desplegadas para acelerar el proceso de sacrificio, comentó Frederiksen.
En el norte del país, hogar de una gran cantidad de granjas de estos animales, se intensificarán las cuarentenas y los esfuerzos de rastreamiento para contener el virus.
Urge OMS investigación Mike Ryan, director ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias de la OMS, urgió el pasado viernes una investigación científica de gran escala para comprender el “complejo problema” de los humanos que han infectado a visones fuera de China.
Los visones, a su vez, pueden transmitir el virus a los seres humanos.
Kare Molbak, director del Instituto Staten Serum, donde se realizaron las pruebas de laboratorio sobre la mutación del virus, señaló que el mundo debe ser extremadamente precavido.
“El peor escenario es una nueva pandemia, que comienza de nuevo desde Dinamarca”, advirtió.
Fuente: Reforma