Personal del Instituto Nacional de Migración, Guardia Nacional y Sedena crearon un cerco humano en la frontera sur del país, donde el comisionado Francisco Garduño Yáñez, encabezó el recorrido de control y verificación migratoria para restringir la entrada masiva de los centroamericanos.
En redes sociales, el INM difundió imágenes del operativo que, se realiza “para mantener vigilancia en la zona y hacer cumplir la Ley de Migración”.
Aunque, la autoridad migratoria no quiso dar a conocer la cantidad de elementos que participan ni los puntos que se vigilarán de manera permanente los próximos días; asimismo, si se valdrán de drones para vigilar caminos de extravío, en Tabasco y Chiapas.
El área de comunicación social del INM, solo destacó que hasta ayer eran 500 agentes migratorios, pero esta mañana arribaron más elementos, tanto a Suchiate como al Ceibo.
Honduras apoya
La policía hondureña controla el paso de los integrantes del éxodo migrante. El argumento es para solicitar pasaporte e identificación de los menores de edad y evitar alguna comisión de delito.
“Se les está pidiendo su tarjeta de identidad y cartilla de nacimiento, es por seguridad de los niños. Así nos aseguramos que los menores viajen con sus padres”, dijo uno de los uniformados.
En redes sociales, los migrantes señalan que no dejan pasar a los niños y niñas, aunque lleven documentos. Mientras, en Guatemala, alrededor de 600 personas hondureñas fueron detenidas en la frontera de Corinto por el ejército y la Policía Nacional Civil y trasladados a uno de los puestos de control de migración para el trámite de retorno a Honduras.
Los militares de Guatemala y México, extendieron la vigilancia en caminos de extravío, de difícil acceso para evitar cualquier ingreso irregular.
Fuente: El Heraldo de México