La lucha contra la 4T no cesa. Las tomas semanales de la delegación Oaxaca, de la Secretaría de Bienestar, con la falsa demanda de vacunas – ahora tocó el turno a grupos de San Pedro Mixtepec, municipio gobernado por un genízaro tricolor, también con antecedentes de conductas violentas – es parte de una estrategia para torpedear el buque insignia de López Obrador, antes de las elecciones.
Las presiones dan continuidad al peligroso precedente que se sembró hace una semana en contra de Nancy Ortiz, la delegada súper poderosa de los programas sociales, so pretexto de retrasos en el suministro de vacunas, no atribuibles a ella, por parte del cabildo y vecinos de Santa Lucía del Camino.
Aprovechando que a la funcionaria la han dejado sola muchos de sus aliados y compañeros de Morena, salvo algunos que condenaron firmemente la agresión del edil Dante Montaño, se busca sustituirla, a fin de que no siga contrapunteándose con el gobierno estatal y suelte las riendas de una dependencia tan importante para el avance de la política social federal. Algo de esto debe saber el Coordinador General de Programas para el Desarrollo, Gabriel García Hernández, quien fue enviado, suponemos, a valorar personalmente esta situación.
Quienes actúan así, rememoran los tiempos cuando en los regímenes del PRI, era práctica común denostar a algún servidor o servidora pública, a fin de conseguir que no solo fuera linchada en los medios de información, sino que, como consecuencia, terminara renunciando. La clase política entendía que las presiones provenían, casi siempre, del palacio de gobierno. En esta operación, resultaban fundamentales medios, periodistas y “declarantes”, que se prestaban a esta sucia tarea.
Han cambiado los tiempos. Ahora, el PRI ya no tiene en su poder la presidencia de la República, cuando los gobernadores del mismo partido y hasta los de oposición, imponían y quitaban a contentillo a los delegados, en oscuras negociaciones con la Secretaría de Gobernación.
Este modus operandi desapareció casi por completo a raíz del arribo al Poder Ejecutivo Federal, de Andrés Manuel López Obrador, quien cortó por lozano dichas concesiones a los poderes locales y cambió diametralmente las reglas del juego. Hoy, las y los servidores públicos que tengan en su contra acusaciones de corrupción, comprobables, o que de manera ostentosa demuestren no estar calificados para dicho desempeño, pueden perder su trabajo… Vaya, los ha cesado el presidente hasta en una conferencia mañanera.
Han salido del gobierno, por ejemplo, quienes han cometido alguna equivocación grave en su conducta, como la primera titular de Semarnat y varios jefes de aduanas corruptos que, proviniendo de anteriores administraciones, seguían en sus andadas protegiendo a bandas criminales.
El caso de la periodista Sanjuana Martínez, directora de Notimex, es emblemático, pues sigue resistiendo, contra viento y marea el acoso de muchos del propio gremio periodístico que no quieren que dicha Agencia del Estado se limpie y opere sin cacicazgos sindicales. Notimex, dicho sea de paso, es la única opción que pudiera contrarrestar con información confiable y favorable a las instituciones, las embestidas de medios de comunicación privados que siguen muy activos para socavar la credibilidad del Poder Ejecutivo, difundiendo noticias falsas y ostensibles mentiras.
En el caso Oaxaca, la vacuna es solo el pretexto para la descalificación y el debilitamiento de instituciones como Bienestar. Debe saberse que en ninguna entidad federativa se ha visto, hasta ahora, que mediante presiones y asonadas se cambie el orden de asignación de los municipios para la inmunización.
Sin embargo, en época electoral las ambiciones están desatadas, pues políticos y gobernantes saben que Bienestar es hoy por hoy la dependencia que llega al corazón de la gente, sea por los programas a grupos vulnerables o por la vacunación.
El operativo de vacunación Anticovid que con algunos sobresaltos y errores avanza en nuestro estado, trae tranquilidad y certidumbre a la mayoría de las personas, porque se trata de la salud y la supervivencia de todos. Si el PRI o el PAN estuvieran gobernando, a nivel federal, otro gallo les cantara. Está claro que conforme avanza esta tarea humanitaria, aumenta la desesperación de los enemigos de la 4T, porque el 6 de junio está cada vez más próximo. Desesperados y sofocados, no quisieran que la política social buscando la igualdad de oportunidades, se vea reflejada en las urnas.
@ernestoreyes14