El Departamento de Justicia de Estados Unidos aseguró este lunes que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), liderado por Nemesio Oseguera Cervantes, alias ‘el Mencho’, es el mejor armado de México.
Señaló que se trata de “una de las organizaciones criminales transnacionales más peligrosas del mundo”, que tiene sus manos en el tráfico de múltiples sustancias mortales y que “ha contribuido a un catastrófico rastro de destrucción humana y física en México”.
En un comunicado difundido por el Distrito Sur de California, la oficina del fiscal señala que el Cártel es responsable de trasladar toneladas de cocaína, metanfetamina y heroína con fentanilo a los Estados Unidos.
Además, recuerda que es un prolífico productor de metanfetamina e importador de productos químicos, que utiliza precursores adquiridos en China e India. “CJNG es uno de los cárteles mexicanos más poderosos que operan dentro de los Estados Unidos”, detalla.
“Es el cartel mejor armado de México. Sus miembros se enfrentan de buen grado a los cárteles rivales e incluso a las fuerzas de seguridad del gobierno mexicano. El CJNG es responsable de horribles actos de violencia y pérdida de vidas”, enfatiza.
El Departamento de Justicia estadounidense realizó estas afirmaciones al informar de los cargos y ordenes de aprehensión giradas por un tribunal federal contra Edgar Herrera Pardo, también conocido como ‘El Caimán’; Carlos Lorenzo Hinojosa Guerrero, alias ‘Cabo 96’; Edgar Pérez Villa, alias ‘Cabo 89’; e Israel Alejandro Vázquez-Vázquez, alias ‘Cabo 50’, entre otros.
Lo anterior, por los delitos de conspiración para distribuir sustancias controladas para importación, así como conspiración para importar sustancias controladas. Menciona que estas personas, presuntos líderes mexicanos del narcotráfico, eran las encargadas “de hacer cumplir la ley de los cárteles de drogas en relación con su presunto apoyo violento al tráfico de heroína y metanfetamina”.
De acuerdo con documentos judiciales presentados por el gobierno, los imputados formaban parte de ‘Los Cabos’, un grupo vinculado al CJNG que operaba en Baja California para asegurarle al cártel el control de la zona. “Los Cabos supuestamente empleó una violencia desenfrenada para garantizar que CJNG mantuviera la capacidad de traficar drogas a través de Tijuana, México, y hacia los Estados Unidos a través de San Diego”, menciona el comunicado.
Detalla que tras más de seis meses de intervenciones telefónicas autorizadas judicialmente, se descubrió la planeación de más de 150 asesinatos, la mayoría de los cuales ocurrieron en Tijuana. Entre estos asesinatos está el de dos adolescentes -ciudadanos estadounidenses- en noviembre de 2018. El gobierno también alega que Los Cabos apuntó a la policía en Tijuana, matando al menos a tres policías.
“Durante demasiado tiempo, cárteles poderosos han realizado una violencia indescriptible en Tijuana, ciudad que está justo al lado de San Diego”, dijo el fiscal federal interino Randy S. Grossman. “Continuaremos nuestra campaña para poner fin al reino de terror de los cárteles y detener el flujo de drogas a través de la frontera procesando a los líderes y agentes de la ley de más alto rango”.
Grossman agradeció a las autoridades estadounidenses federales y locales, además de a la Fiscalía General de la República de México (FGR), que les brindó una asistencia significativa en esta investigación.
“Los cárteles de la droga como Cártel de Jalisco Nueva Generación, también conocido como CJNG, continúan inundando nuestras comunidades con heroína y metanfetamina”, dijo el agente especial de la DEA, John W. Callery.
“Estos carteles no solo perpetran violencia y asesinatos que afectan a nuestros vecinos al sur de la frontera, sino que sus drogas causan muerte y destrucción en nuestras propias comunidades. Las acusaciones sustitutivas y las órdenes de arresto contra miembros violentos del CJNG son testimonio de que la DEA y nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley continuarán trabajando enérgicamente para identificar y arrestar a los miembros de estos cárteles de la droga”, enfatizó.
Este caso fue llevado por el Grupo de Trabajo Antidrogas contra el Crimen Organizado (OCDETF), cuya misión es identificar, desarticular, desmantelar y enjuiciar a miembros de alto nivel de organizaciones y empresas de narcotráfico, tráfico de armas y lavado de dinero.
El fin de semana, el exembajador de Estados Unidos en México durante el gobierno de Donald Trump, Christopher Landau, criticó que su país no tenga una estrategia para abordar el uso extendido de drogas en su territorio y que ésta solo se limite a pedirle a México que capture a los narcotraficantes y los extradite.
Señaló que “Estados Unidos no puede depender de México, ni de ningún otro país extranjero” para resolver su problema de drogas. Denunció que las agencias antinarcóticos, en especial la DEA, mantienen una mentalidad de Eliot Ness cuyo objetivo principal es “atrapar a los malos y llevarlos ante la justicia”.
Fuente: Aristegui Noticias