Al participar en el proceso de mediación que permitió la liberación de un grupo de servidores públicos en Santiago Textitlán, el ombudsperson Bernardo Rodríguez Alamilla reconoció la voluntad mostrada por las y los pobladores de dicha localidad para canalizar por la vía del diálogo sus demandas.
Desde la Sierra Sur, a donde acudió el gobernador del estado, Alejandro Murat Hinojosa, el secretario General de Gobierno, Francisco García López, el delegado de la Secretaría de Gobernación, José Carlos Fuentes Ordaz, a establecer una mesa abierta con autoridades y pobladores, el defensor de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca afirmó que la solución a este tipo de conflictos pasa en un primer momento por reconocer la deuda histórica que el Estado mexicano tiene con sus comunidades indígenas.
Pero también, apuntó, con generar condiciones de justicia y paz que les permitan reconstruir su tejido social cuando este se ha visto afectado.
El titular de la DDHPO sostuvo que los conflictos agrarios, así como aquellos relacionados con la distribución de recursos entre agencias y sus municipios, representan grandes retos en la entidad oaxaqueña.
Además de que advirtió, la gestión inadecuada de los mismos puede dar lugar a agresiones entre comunidades, desplazamiento de personas y erosión de su tejido social, por lo que convocó a los distintos niveles e instituciones de gobierno atender estas problemáticas de manera integral.
Asimismo, Rodríguez Alamilla reconoció que el diálogo es el medio más eficaz para garantizar, en el largo plazo, la gobernabilidad y respeto a los derechos colectivos de las comunidades y de sus habitantes, por ello siempre se tiene que privilegiar.
“El éxito de la mediación llevada a cabo en Santiago Textitlán no debe medirse solo por la liberación de las personas retenidas, sino por el cabal cumplimiento a los acuerdos generados entre las autoridades con los habitantes de Santiago Textitlán”, apuntó.
Y agregó que, en este sentido, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca se mantendrá vigilante al cumplimiento de los puntos convenidos y acompañará el correcto ejercicio de los mismos.
Finalmente, el ombudsperson oaxaqueño aseguró que la paz, el diálogo y los acuerdos son los ejes articuladores que permiten establecer procesos de transformación positiva de conflictos a largo plazo de las distintas comunidades.