-Se despiden diputados con “golondrinas”
La frase fue aplicable: “abrazos, no balazos”. Fusionados en apretones, buenos deseos, priistas, morenistas, petistas y despistados se despedían en medio de las “golondrinas”. Algunos pretendían cerrar su labor legislativa vestidos de “gloria”, otros más pasaron desapercibidos.
En el orden del día, no estaba, desapareció. La iniciativa de reforma a la ley Orgánica del Poder Legislativo no figuró, la bajaron.
Se requerían de 28 votos a favor, se lograron 24 pero después la mayoría se desmoronó; los morenistas no lograron mantenerse con todo para la próxima legislatura, en donde buscaban mantener el poder absoluto en la Mesa Directiva y la Junta de Coordinación Política, por tres años.
Después de 24 horas de receso, la sesión “maratónica” fue reanudada, no hubo gritos, reproches, todos y todas estaban “alineados”, nadie más habló de la reforma que se disipó en medio de abrazos entre grupos políticos contrarios y las golondrinas.
Fotos, felicitaciones entre los propios legisladores se departían en el salón de plenos, en donde los protagonistas se desgarraban las “vestiduras” por el trabajo realizado.
Las cuentas públicas del 2018, 2019 y 2020, del gobierno actual no fueron aprobadas, pero eso, eso a nadie importó. También lo desaparecieron del orden del día.
Entre aplausos, el diputado Mauro Cruz Sánchez y Gustavo Díaz Sánchez asumieron la presidencia y vicepresidencia de la Diputación Permanente.
Después todo concluyó. El salón de plenos se quedó en silencio. Algunos diputados y diputadas salieron por la puerta principal unos más corrieron por la puerta de atrás.