México.- El costo financiero de la deuda pública de México se redujo 9.2% entre enero y agosto de 2021, se trata de la primera vez que baja en ocho años, pues la última vez que esto ocurrió fue en 2013.
Según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), durante los primeros ocho meses de este año el costo financiero de la deuda implicó para el gobierno un desembolso de 422 mil 430 millones de pesos, lo que representó una reducción del 9.2%.
Se trata de la cantidad que el gobierno paga por los intereses y comisiones que se cobran por la deuda pública, la cual se redujo este año por primera vez en 30 millones 600 mil pesos.
La última vez que el costo financiero de la deuda había bajado fue en 2013, cuando disminuyó 4.8%, por lo que la de 2021 es la mayor reducción registrada desde 2010, cuando fue de 12.6%.
“Como reflejo del manejo estratégico y activo del portafolio de la deuda pública, el costo financiero fue menor en 30,600 millones de pesos a lo programado, y disminuyó 9.2% real con respecto a enero-agosto del 2020”, resaltó en su reporte la Secretaría de Hacienda.
La dependencia también destacó que con esta reducción se logró un gasto programable menor al estimado para los primeros ocho meses del 2021, además de lograr liberar recursos para “fines productivos”.
Expertos señalan que la reducción del costo financiero de la deuda también obedece a que -a nivel global- muchos bancos centrales, incluyendo el Banco de México (Banxico), bajaron sus tasas de interés para enfrentar el impacto de la pandemia. Como México tiene parte de su deuda contratada en el extranjero, el país se vio beneficiado por la reducción de tasas internacional.
En contraste los años en los que el costo de la deuda pública de México ha sido mayor fueron la mayor parte en el sexenio de Enrique Peña Nieto: en 2015, cuando aumentó 20.60%; en 2016, con 14.90%, y en 2012, con 13.20%.
La deuda neta del gobierno asciende a 9 billones 808.2 mil millones de pesos, de los cuales el 77% se encuentra en moneda nacional, y el 79.9% a tasa fija y a largo plazo.
Estas cifras forman parte del compromiso del gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) de no aumentar la deuda pública.
A fines de septiembre, el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, detalló que la deuda recibida por el gobierno de AMLO fue en 44.9% del PIB, y se mantuvo así a lo largo de 2019; para 2020, subió a 52.3%, porque el PIB cayó 8.2% debido a la inflación.
Para julio de este año, el porcentaje de deuda del PIB fue de 48.2%, por lo que Hacienda se comprometió a mantenerla rondando el 50%.