Un vendedor de raspados fue retirado de la calle de Independencia esquina Porfirio Díaz, en donde pretendió colocarse para realizar ventas, lo que fue impedido por Inspectores Municipales.
Los funcionarios municipales apoyados por la Policía Municipal argumentaron que no se tiene autorización para colocarse en esta zona, ya que fue despejada desde la administración pasada.
Los vendedores indicaron que tenían un permiso que pagaron desde el año pasado, y actualmente no se ha llevado a cabo el proceso para el pago correspondiente al presente año.
Vendedores y autoridades discutieron verbalmente sobre lo que sucedía, pero los inspectores afirmaron que moverían el puesto a otra calle, el cual llevaron a la esquina de 20 de Noviembre e Hidalgo.
Los inspectores señalaron que éstas acciones forman parte de los trabajos de regularización del comercio informal, lo que está trabajando el actual gobierno de la ciudad.