Los mexicanos necesitan de un drástico cambio de vida para evitar que sigan creciendo los índices de sobrepeso y obesidad, y para ello es esencial modificar la nutrición, aseguró este domingo la nutrióloga Carmen Ruiz.
“Se trata de vivir mejor, no solo de vivir más y ello pasa al modificar los hábitos alimenticios”, aseguró Ruiz, licenciada en Dietética y Nutrición y maestra en Ciencias de la Educación Familiar.
La pandemia de COVID-19 ha provocado un empeoramiento de las cifras de sobrepeso y obesidad, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) de la Secretaria mexicana de Salud.
El 59 % de los hogares presentan algún grado de inseguridad alimentaria y se mantiene alta la proporción de padecimientos crónicos, como diabetes con 10.6 % y 13.4 % para hipertensión arterial en adultos.
La Ensanut ofrece un retrato del perfil de un pueblo crónicamente enfermo por afecciones no transmisibles, causantes de la tercera parte de las muertes en México y que son producto de ese modelo de desarrollo que ha sustituido la nutrición.
Desde hace varias décadas se mantiene una mala nutrición con exceso de productos industrializados, procesados y ultraprocesados, con alto valor calórico y muy bajo valor nutricional, según la Ensanut.
La proporción nacional de sobrepeso y obesidad en personas adultas es del 74.1 %, lo que representa el 2.8 puntos porcentuales de aumento respecto a 2012.
Para combatir la epidemia de los altos índices de sobrepeso y obesidad, la nutrióloga Carmen Ruiz aconseja consumir snacks de origen natural y ricos en fibra entre comidas ya que son adecuados para brindar energía y sensación de saciedad para mejorar nuestra dieta.
“Hay que cambiar el tipo de snacks que ahora se consumen para ingerir otros que sean saludables y que tengan valor nutritivo como las almendras que se pueden combinar de muchas formas”, aseguró la nutrióloga.
“Es importante tener en cuenta que lo que comamos debe estar rico y por eso hay múltiples combinaciones, sobre todo, pensando en los niños”, agregó.
“Hay muchas combinaciones diferentes. Por ejemplo, el yogurt y las almendras o utilizar los licuados con determinadas frutas como una manera de ingerir nutrientes y vitaminas”, afirmó Ruiz.
La experta en dietética recordó que el momento del snack o colación es parte fundamental de la alimentación para conseguir un equilibrio nutricional.
“Por ello la importancia del consumo de almendras. Se recomienda un puñado al día (23 piezas), porque contribuyen no solo al control de peso sino también a mejorar la salud cardiovascular y prevenir las enfermedades crónicas. Hay que saber comer mejor para prevenir que las futuras generaciones sigan engordando”, concluyó.