La Organización Mundial contra la Tortura (OMCT) denunció que en México sigue limitado el reconocimiento constitucional de los derechos de los pueblos indígenas, lo que ha incidido en los abusos en su contra.
En su informe ¡…Pues es tortura!, elaborado junto al Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba), la OMCT critica que las instituciones mexicanas sigan trabajando desde una mirada colonial.
Condena que el espíritu de políticas públicas asistencialistas sea que las poblaciones indígenas tengan que integrarse a un proyecto de nación concebido por las élites mestizas dominantes.
Pero el principal problema, enfatiza la OMCT, es la militarización del país, por jugar un papel fundamental en el despojo de territorios ancestrales.
Asegura que desde hace décadas las comunidades indígenas son azotadas por el despojo, la explotación y la falta de reconocimiento de la tenencia de sus tierras.
Las autoridades mexicanas han implementado una política de despojo territorial en beneficio de intereses privados con el argumento del “desarrollo” de las comunidades indígenas”, sentencia.
La situación, afirma el informe, ha prevalecido en la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador con proyectos como el Tren Maya y el Corredor Transístmico “que destruirán los territorios indígenas”.
Pero también se documenta desplazamiento forzado de indígenas mayas tsotsiles en el municipio de Aldama en Chiapas, por la violencia.
El desplazamiento forzado en los pueblos indígenas afectó sus bienes culturales, intelectuales, religiosos y espirituales al ser privados de ellos sin su consentimiento libre, previo e informado, así como en la violación de sus sistemas normativos, tradiciones y costumbres propios.”
El informe de la OMCT refiere también que las investigaciones contra personas indígenas en México se caracterizan por la fabricación de confesiones o declaraciones autoinculpatorias, a través de la tortura.
Lamenta que las autoridades se aprovechen de la marginación, pobreza y el desconocimiento del castellano de los indígenas.
La OMCT hace un llamado al Gobierno de México a liberar a todas las personas defensoras de derechos humanos indígenas y comunitarias, privadas arbitrariamente de la libertad.
A las autoridades de Chiapas pide generar mecanismos que permitan una implementación eficiente, eficaz y culturalmente pertinente de la Ley para la Prevención y Atención del Desplazamiento Interno en el Estado de Chiapas, de tal manera que se desmilitaricen las comunidades indígenas, desarticule, desarme e investigue a los grupos armados en los Altos de Chiapas para garantizar el retorno seguro de las comunidades desplazadas.
También urge la creación del Registro Nacional de Tortura, tal como lo establece la Ley General para Prevenir, Investigar y Sancionar la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes.
Fuente: López-Dóriga Digital