Se acerca la hora de la verdad, la madre de todas las encuestas, la voluntad del pueblo de Oaxaca. El 5 de junio, y los aspirantes punteros andan con los nervios de punta.
A estas alturas de la campaña a la gubernatura de Oaxaca ya se perfila cómo estará la elección y por las señales que mandan tanto el morenista Salomón Jara Cruz de la coalición “Juntos Hacemos Historia” como el priista Alejandro Avilés Álvarez de la alianza común PRI-PRD, habrá competencia, no todo está dicho.
Así se observa en este último estirón.
Miren, de entrada, esta columnista no cree en las encuestas porque son de quien las paga, solitos se engañan, lo que sí se observa es que la campaña del candidato puntero morenista Salomón Jara Cruz dio un viraje de 180 grados, porque estaba muy confiado en que al haber caminado ya los 570 municipios con Andrés Manuel López Obrador “Cabecita de algodón” por 12 años le daría el triunfo en automático.
Quizás si el candidato del Partido Revolucionario Institucional hubiese sido otro, podría Salomón estar con esa tranquilidad, pero le tocó como contrincante un “bandido” en toda la extensión de la palabra, el que, de acuerdo con su perfil, a su forma de ser, diseñó su propia máscara para competir en una campaña sumamente complicada, donde efectivamente hay un gran descontento de la ciudadanía hacia el PRI.
Pero la máscara le ha dado resultados porque creció, no sé si le alcance para ganar, pero ya los puso nerviosos y uno de los puntos fundamentales en una elección es la estructura que tenga el partido, la capacidad de movilización que demuestren un día antes y el día de la jornada electoral. Aquí vamos a ver cómo se desenvuelven las y los priistas, que históricamente en Oaxaca ese factor es lo que les ha permitido ganar.
OJO, la estructura y la movilización valen oro en una elección.
Tienen a un Morena fuerte, pero con AMLO, sin López Obrador el partido no tiene la misma fuerza, por ello, a estas alturas de la campaña, Jara Cruz se da cuenta que la elección gubernamental puede emparejarse y decide dar el viraje, está al 100 por ciento caminando.
Hasta los comunicados me llegan triples.
Y el presidente López Obrador, aunque ha dicho que no se mete, la verdad es que sí lo hace sigilosamente dando su aval para que las y los funcionarios federales, como Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López Hernández hasta gobernadoras como la de Tlaxcala, Lorena Cuéllar llegaran a reforzar la campaña del oriundo de Betaza.
El próximo sábado arriba a la entidad oaxaqueña el canciller y aspirante a la presidencia en el 2024, Marcelo Ebrard, y viene con el mismo propósito, ayudar al candidato de la coalición “Juntos Hacemos Historia”.
Pero hay otro factor que también da signos y señales de que sí hay alerta en el bunker-Jara, las diversas denuncias y advertencias que han estado señalando el equipo de Morena en voz de Benjamín Viveros sobre el mecanismo de denuncia ciudadana por la posible compra del voto, las anomalías e irregularidades que pudiesen presentarse y ponen en marcha la “línea de la esperanza” con el número 8004440736.
El temor es a la compra y coacción del voto, señalan compra de credenciales y el sufragio a cambio de despensas por un monto de $500 pesos, apostando el PRI, a que la ciudadanía no participe en la jornada electoral del 5 de junio.
Difiero de esa percepción, por lo que se ve serán elecciones copiosas, es la renovación de la gubernatura, no es cualquier elección, la más importante del estado de Oaxaca.
Por supuesto el PRI salió a aclarar el asunto, y niega rotundamente esos señalamientos como también lo de la famosa tripleta de despensa en una tienda de autoservicio.
Cuando un candidato o candidata empieza con ese tipo de denuncias, es porque hay alerta y uno de los ejes que Morena necesita reforzar es su estructura, porque es la que va a vigilar precisamente que esas cosas no sucedan tan fácilmente, es la que va a cuidar la elección, pero parece que no le dieron importancia y en esos menesteres los priistas tienen colmillo retorcido.
Eso lo sabe perfectamente Jesús Romero López, el coordinador de campaña, igual que Amador Jara Cruz, pero han estado tan soberbios y seguros, que esa confianza puede afectar al candidato puntero, tan es así, que a pesar de la lluvia de denuncias en contra de AAA, 60 para ser exactos, no lograron tumbarle la máscara.
Dioses, la competencia es la máscara. Esa sería la marca del AAA, jajajaja.
Y aquí va otra observación. Los partidos que se le pegaron como lapa a Morena, ¿ya trabajaron su estructura?
Dicho por los propios morenistas que no están contentos, el Partido Verde Ecologista en Oaxaca lo único que han hecho sus dirigentes como Raúl Bolaños Cacho Cué, Pepe Estefan Guillessen y el camaleónico Samuel Gurrión, principalmente estos dos últimos es ir a cada evento solo a tomarse la foto, cero trabajos partidistas de movilización.
Platiqué con una exdiputada morenista y me decía, después de la elección les vamos a pedir cuentas a esos del Verde que solo son pasarela, que hasta incomodaron al secretario de gobernación, Adán Augusto en Zaachila porque a fuerzas se metieron para la foto, ellos no trabajan.
O díganme ustedes ¿qué evento le han hecho Raúl Bolaños, Samuel Gurrión, Pepe Estefan y Eva Diego al candidato morenista?, en donde se vea la fuerza verde, o Salomé Martínez con su organización Fuerza por México.
¡Plop!
En Morena uno de los pilares fuertes que ha trabajado bien el distrito de Tlaxiaco es el diputado Sergio López Sánchez, ayer se vio la concentración masiva o movilización que hizo, si todos quienes tienen un puesto de elección popular trabajaran así, estoy segura de que Salomón Jara podría irse tranquilamente a su casa sin preocuparse de hacer campaña, pero en el partido guinda no todos tienen puesta la camiseta.
Y en una crítica constructiva, estamos a prácticamente 11 días de la madre de las batallas, es momento de que el candidato morenista Salomón Jara Cruz siente a todos los figurines que solo van a la foto para que los obligue a trabajar en serio, no le da ningún resultado que lo acompañen a todos los eventos, si lo que necesitan es formar y cuidar la estructura, tener verdadera capacidad de movilización para la hora de la verdad.
Por ejemplo, el Benjamín Viveros, dirigente estatal de Morena, debería estar trabajando en la estructura, coordinando el activismo político en todo el estado, checando a los comités municipales y todo lo que concierne a un verdadero líder de un partido, haciendo campaña paralela al candidato, visitando a la militancia, tocando puerta por puerta, pero también prefiere andar en todos los mítines del aspirante y la dirigencia estatal abandonada.
Hasta ahora les está cayendo el veinte que hay que reforzar la campaña.
Y ya para cerrar este espacio, anoche los dirigentes nacionales del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, del PAN, Marko Cortés y del PRD, Jesús Zambrano confirmaron que podrían ir aliados en los estados de Quintana Roo y Oaxaca, en el último estirón panistas abrieron la puerta, señal de que la elección se pondrá muy interesante. Y llaman al voto útil.
Aunque la candidata del PAN, Naty Díaz Jiménez ha dicho que no declinará por ningún aspirante, al final veremos si su líder nacional Marko Cortés la convence.
¿La moneda está en el aire?
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