El pasado 15 de junio hubo elecciones especiales en Texas en las que una mexicana, Mayra Flores, hizo historia, al ganar y convertirse en la primera mujer de origen mexicano en trabajar en la Cámara de Representantes, por el distrito 24 del Congreso de Texas.
Flores, nacida en Burgos, Tamaulipas, en 1985, es republicana. Y critica fuertemente a los demócratas. “Hemos sido leales a un partido que no ha hecho absolutamente nada por nosotros», dice, en declaraciones a CNN. Agrega que tiene familia en México que no viajan a Estados Unidos para visitarlos porque “tienen miedo de venir” a Estados Unidos.
La mexicana, quien a los seis años emigró con su familia a Estados Unidos, está casada con un agente de la Patrulla Fronteriza.
El martes, en un mitin con sus simpatizantes, declaró: “Por más de 100 años, nos han dado por sentados. Les mostraré lo que significa la verdadera representación. Representaré a todas las personas”.
Su triunfo representa una llamada de atención para los demócratas, que tradicionalmente habían ganado en esta zona del Valle de Río Grande. Flores se convirtió así en la mujer que despojó a los demócratas de un escaño en el Congreso que tuvieron por más de 100 años.
Flores asegura que fue criada con “fuertes valores conservadores”. Es provida y defensora de la Segunda Enmienda que garantiza el derecho a poseer y portar armas.
En sus declaraciones a CNN, afirmó que los republicanos no son sólo “los más ricos”, o “los blancos”. Una republicana, insistió, también luce como ella.
Como otros republicanos, está a favor de aumentar la seguridad en la frontera sur de Estados Unidos, y de fortalecer el sistema de migración legal.
Los republicanos calificaron el triunfo de Flores, quien incluso recibió el apoyo del multimillonario Elon Musk, como un “modelo de éxito en el sur de Texas”.
Pero es un triunfo que podría durarle poco. La elección especial, en la que participaron cuatro candidatos -dos demócratas y dos republicanos-, fue para sustituir al demócrata Filemón Vela, quien dejó su escaño para unirse a una forma de abogados.
Flores ocupará ese escaño hasta enero de 2023, pero en noviembre próximo deberá enfrentarse, en las elecciones de medio término, al demócrata Vicente González. Los demócratas confían en que González se impondrá sobre Flores, una gran simpatizante del expresidente Donald Trump y quien asegura que “siempre pondré a Estados Unidos primero”.
Aunque ha asegurado en distintas ocasiones no ser defensora de las teorías de la conspiración QAnon, Flores ha utilizado recurrentemente hashtags de los simpatizantes de ese movimiento en sus posteos en medios sociales. Todo eso podría cobrarle factura en noviembre. Por lo pronto, la mexicana disfruta su momento, de haber hecho historia en el país.