Ante insultos, deploran que gobiernos de México y de Oaxaca se queden callados
Líderes migrantes de origen mexicano, activistas de derechos humanos y académicos radicados en Estados Unidos condenaron las declaraciones de discriminación, racismo, homofobia y xenofobia de tres concejales de Los Ángeles California y un líder laboral, en contra de un menor afroamericano y la comunidad indígena oaxaqueña.
Luego de difundirse una conversación de los concejales Kevin de León, Gil Cedillo, Nury Martínez -hija de padres inmigrantes- y el presidente de la Federación Laboral del Condado de Los Ángeles, Ron Herrera, las y los liderazgos migrantes entrevistados por Primera Línea MX, lamentaron que hasta el momento ni el Gobierno mexicano, ni el estatal de Oaxaca, hayan mostrado su indignación por estas declaraciones.
Para Odilia Romero Hernández, radicada en Los Ángeles, co-fundadora y directora ejecutiva de Comunidades Indígenas en el Liderazgo (Cielo), “el Estado nos tiene en el abandono, y eso lo hemos padecido durante mas de 530 años, no nos sorprende eso, lo que nos llama la atención es que apenas vean los ataques anti-indígenas”.
Sobre la ausencia y el silencio de los gobiernos federal y estatal de Oaxaca, la defensora de los derechos humanos indígenas, y primera mujer en coordinar el Frente Indígena de Organizaciones Binacionales (FIOB), dijo que “al final te das cuenta que como indígenas migrantes, nos rascamos con nuestras propias uñas, es el pueblo quien ha salido en defensa del pueblo”.
“Todos hablan muy bonito de Oaxaca, que sí somos trabajadores, pero a la hora de exigir nuestros derechos, dónde están, no se juntaron ni mil mexicanos, ni mil latinos éramos nosotros y la comunidad negra”, afirmó.
Lamentó que estos ataques contra las comunidades indígena, negra y LGTTTIB+, provienen de una mujer y hombres de ascendencia latina.
“Habría que tenerlo claro, porque la latinidad es muy peligrosa para las comunidades indígenas, porque se asume que todos hablamos español y se asume que todos los mexicanos o de América Latina hablan español y eso tiene consecuencias muy graves de libertad o de muerte”, explicó.
Informó que continuarán exigiendo el respeto de los derechos humanos de las y los indígenas, los derechos lingüísticos y que sobre todo, que pare la violencia lingüística en su contra.
La dirigente e interprete trilingüe, destacó que es la primera vez que un presidente estadounidense se manifiesta a favor de estas comunidades, en este caso Joe Biden, pidiendo la renuncia de la y los concejales agresores y racistas.
El pasado 9 de octubre, de forma anónima se filtro una grabación de audio, donde Nury Martínez insultó al hijo adoptivo negro del concejal Mike Bonin, diciendo: “este niño necesita una paliza” y posteriormente llamándolo despectivamente “changuito”.
Durante la discusión, también mencionó: “veo muchas personas pequeñas y oscuras allí” en referencia a Koreatown. “Coreanos oaxaqueños. Ni cómo Kevin. Chiquitos”, respondió Cedillo -el otro concejal-. Luego continuó: “Yo estaba como, no sé, de qué pueblo vinieron, cómo llegaron aquí, pero lo que sea”. También se la puede escuchar comentar, “tan feos” o “son tan feos” en español.
En medio de criticas y manifestaciones afuera de la alcaldía de Los Angeles, acompañadas por los acordes de música tradicional oaxaqueña, Martínez a modo de disculpa, mediante un comunicado, expuso que: “ha sido uno de los momentos más difíciles de mi vida y reconozco que esto es totalmente culpa mía. En este momento, necesito tomarme una licencia y tomarme un tiempo para tener una conversación honesta y sincera con mi familia, mis electores y líderes comunitarios”.
Actualmente, Nury Martínez – quien mantiene su escaño- y solamente renunció al cargo de presidenta del concilio, al igual que el líder laboral Ron Herrera, anunció su separación temporal del cargo, en tanto que el Presidente Joe Biden se pronunció por su renuncia.
Para Carlos Arango activista de derechos humanos, no es suficiente, que se retire unos días, es una ofensa brutal para la trabajadora comunidad indígena oaxaqueña, que le ha aportado mucho a esta nación y estos actos abren un herida y provocan un grave problema racial.
El dirigente migrante de origen mexicano, consideró que es deplorable que mientras en Estados Unidos es un escándalo, ni el Presidente de México Andrés Manuel López Obrador, ni el canciller Marcelo Ebrard o el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, hayan elevado su más enérgica protesta por estos actos discriminatorios.
“No hay pronunciamientos, por lo menos de Marcelo Ebrard, pero parece que está muy asustado por el libro del Rey del Cash, donde le hacen acusaciones, guardan silencio y la omisión es también una actitud del gobierno mexicano lamentable”, denunció.
Radicado en Chicago, Arango expresó que los consulados son meras oficinas de trámites, no tiene la dignidad ni siquiera de hacer un pronunciamiento, ni el cónsul, menos el gobierno de Oaxaca.
Las declaraciones vertidas son producto de una total ignorancia, “abrieron una herida que ni siquiera con las renuncias de algunos de los involucrados se resuelve”, sostuvo luego de acusar que “como siempre los migrantes, sus familias radicadas en Estados Unidos y en sus comunidades de origen, estamos solos”.
Joel Ochoa, activista de los derechos de la comunidad migrante en California, dijo que las declaraciones racistas “ofendieron no solo a la comunidad migrante y al pueblo indígena oaxaqueño, es una ofensa en contra de todos los hispanos que estamos luchando y tratando de salir adelante”.
La comunidad indígena oaxaqueña tiene una larguísima tradición, en la contribución del establecimiento de la agro industria en Estados Unidos, además es uno de las pueblos mas sofisticados, de donde provienen ilustres intelectuales como José Vasconcelos y el primer presidente indígena Benito Juárez, puntualizó.
“Hay que tener cuidado con lo que se dice, es ofensivo viniendo de una persona de origen mexicano, donde además sus padres llegaron a la Unión Americana de forma indocumentada” advirtió Joel Ochoa al referirse a Nury Martínez.
En ese sentido, el doctor Octavio Pescador, investigador asociado y cofundador del Instituto Paulo Freire de UCLA en la Escuela de Graduados en Educación y Estudios de la Información, expresó que hay una gran indignación en la comunidad hispana, latina, indígena y afroamericano por estos hechos.
Las ofensas vertidas reflejan la falta de ética, de educación cívica y humana, “la comunidad oaxaqueña es una de las más exitosas, han logrado establecer negocios que generan inversiones y empleos”.
Dedicado durante las últimas dos décadas, a colaborar con estudiantes, organizaciones comunitarias sin fines de lucro y grupos de inmigrantes en Los Ángeles, el también académico detalló que las y los oaxaqueños son ejemplares, en todos los ámbitos.
“Convivo con jóvenes destacados, conozco compañeros trilingües, empresarios, músicos como Estanislao Maqueo creador de la orquesta intergeneracional, gente muy productiva, creativa, decente”, añadió.
Señaló que los representantes de los consulados, de la Cancillería, de la secretaria de Turismo, en México y del propio gobierno estatal de Oaxaca, deberían salir a resaltar el amor a esta comunidad tan valiosa.
Esperaría que en vez de criticar, se manifieste un agradecimiento a la comunidad migrante indígena oaxaqueña, “por todos los recursos, trabajo, esfuerzo, arte, cultura, miles de años de historia, filosofía, que han aportado a esta nación, y al mundo entero”.