Con calles inundadas de basura, marchas y bloqueos constantes, la capital oaxaqueña se ha deteriorado a un grado criminal, sostuvo el cronista de la ciudad, Jorge Bueno Sánchez quien exigió detener estos ataques al patrimonio y a la ciudadanía: “basta de destruir a Oaxaca”.
El ingeniero de profesión, conocedor y fedatario del acontecer local, reconoció que la también llamada Verde Antequera como ciudad virreinal, solo ha logrado preservarse en un 70 por ciento, ante los permanentes atentados a su infraestructura y a los derechos de su ciudadanía.
“No se puede caminar libremente en las calles cerradas por los plantones, las marchas y ahora por los montones de basura que aparecen diariamente, sin que las autoridades tomen su papel y sancionen a los responsables”, afirmó.
Lamentó los 400 grupos que llegan a destruir, lapidar, vituperar y lastimar a la ciudad, a pintarla, a romper ventanas y puertas, “pero lo más increíble es que no se castigue el daño en propiedad ajena, que no se castigue a quien atenta contra el patrimonio mexicano”.
Acusó que a la antigua Antequera -declarada en 1825- llegan grupos agresivos con líderes banales, enriquecidos con el dolor de la gente y con el dinero que les da la autoridad, vienen a destruirla, esperando que en el vandalismo la autoridad les de dinero cuando deberían meterlos a la cárcel, por las violaciones constantes a la ley y a los derechos de los ciudadanos.
El ex integrante del Patronato para la Conservación del Patrimonio Cultural y Natural del Estado de Oaxaca en 1995, reconoció que a estas alturas perder el reconocimiento como Patrimonio Mundial de la Humanidad “es el menor de los efectos de los tiraderos de basura, porque antes de que se cancele esta declaratorio, habrá muertos por los daños a la salud, de tanta contaminación al aire libre”.
El también ex Director del Centro Cultural y Jardín Etnobotánico Santo Domingo de la ciudad de Oaxaca, expresó que no es posible que en el mundo entero exista tecnología que aprovecha la basura para generar energía y recursos adicionales en las economías, “mientras que aquí no se hace nada, por eso reitero la necesidad de la autoridad retome su papel y la ciudadanía cambie sus hábitos para reducir la generación de desechos”.
Señaló que ya es tiempo de evolucionar y dejar las divisiones, “tenemos que impedir que la politiquería se adueñe de todo, y por el cariño que sentimos por Oaxaca, defendamos nuestro patrimonio y el entorno natural de esta ciudad”.