Al dolor de perder a un ser querido, se suma la difícil tarea de buscar dónde depositar sus restos, sobre todo cuando la muerte llega de forma repentina, tomando en cuenta que actualmente ya no hay lugar en ninguno de los cinco cementerios que existen en la capital, reconocieron autoridades municipales y responsables de funerarias, quienes urgen buscar espacios para la construcción de uno nuevo.
El ex administrador de la funeraria del IMSS, Eladio Luis Vasquez señaló que desde hace cuatro administraciones municipales en la capital, ya no hay espacios en los cementerios públicos, “ya tiene tiempo que se carece de estos espacios, son los familiares quienes tienen que buscar el terreno y solo contratan el servicio de velatorios, inhumaciones y cremaciones”.
Señaló que cada trienio municipal se promete que habrá un nuevo espacio, “pero es lo mismo, que buscan, que no encuentran, ya no creemos nada, que si compran o no terrenos”.
Sin embargo, consideró que hace falta un nuevo cementerio “por supuesto, que se necesita, las familias en pandemia optaron por la cremación, pero el pueblo oaxaqueño tiene sus tradiciones y prefieren las inhumaciones”.
José Manuel Nuñez Banuet empresario de servicios funerarios manifestó que desde el año 2008 -en su caso- comenzaron a buscar terrenos apropiados para crear un cementerio privado, “porque ya no había espacios en el municipio y teníamos necesidad de atender y darle solución a quienes nos solicitaban el servicio de inhumación”.
Explicó que en su experiencia tardaron aproximadamente un año para obtener los permisos necesarios, principalmente con las autoridades municipales, en esta caso en Tlacolula, a fin de crear un cementerio digno.
“Hemos tratado de hacer un lugar bello, arbolado, digno, donde usted al entrar, verá condiciones de limpieza, paz y tranquilidad, con todos los servicios perfectamente ordenados, entonces se va a entender que las cosas cuando se hacen bien pueden ser aceptadas por una comunidad porque se hacen de la mejor manera posible”.
Expresó que la capital requiere desde hace varios años un espacio para brindar estos servicios, sobre todo en momentos como la pandemia del Covid-19, donde se registraron muertes súbitas, que en ocasiones no dan el tiempo suficiente para tener preparado un servicio funerario que incluya un lote en un cementerio.
En ese sentido, cabe destacar que de acuerdo a cifras del Inegi y de los servicios de salud estatal, en 2020, el número de defunciones alcanzó en la entidad los 33 mil 072 fallecimientos, mientras que en 2021, el Covid-19 se colocó como la segunda causa de muerte a nivel estatal, propiciando el fallecimiento de 2 mil 978 personas en Oaxaca. Durante la pandemia y hasta el 27 de octubre, se reportan 6 mil 343 muertes provocadas por el SARS Cov-2.
Al respecto, Núñez Banuet expuso que la comunidad oaxaqueña lentamente transita a una cultura de preferir las cremaciones por encima de las inhumaciones, “con la pandemia un hubo incremento de estos servicios, donde incide la economía porque es mas caro conseguir un espacio en el panteón y la urna -con la cremación- brinda posibilidades de hacer otros homenajes: enterrarla, sembrar con ella un árbol, e incluso conservarlas en lugares cercanos a las familias”.
Enfatizó sin embargo que no es un cambio de la noche a la mañana, es tendencia incluso mundial, pero en Oaxaca es un modelo lento -de hace 20 años, a la fecha-, que sin duda requiere de varios años más, por lo cual se sigue haciendo necesario contar con espacios dignos para depositar los restos de nuestros seres queridos de forma tradicional.
Ante esta situación la regidora Mirna López Torres propuso al Cabildo de la capital iniciar los trámites para realizar un estudio sobre la viabilidad técnica, presupuestaria, financiera y social para la adquisición, instalación y comienzo de funciones de un nuevo panteón municipal.
La propuesta que fue aprobada por el pleno del cabildo municipal, instruye al instituto de planeación municipal, a la secretaria de gobierno, a la del medio ambiente, y la tesorería municipal para realizar estos estudios e incluso en su caso, buscar la viabilidad de concesionar dicho servicio a cualquier persona física o moral con capacidades para ello.
Debido a que en la mayoría de Agencias de policía y municipales este servicio de panteones es preferente o reservado -según sus propios usos y costumbres- a las personas nativas o familiares directos de quienes nacieron en dichas demarcaciones, se reduce la posibilidad de sepultura.
Manifestó que entre los cinco panteones General; San Miguel; Marquesado; Xochimilco y Jardín suman 23 mil 745 fosas y nichos, que ya se encuentran ocupados.
Por ello, la ciudadanía se encuentra ante esta problemática, “no hay lugares y ahora hasta los pasillos se están ocupando para inhumar, y se empiezan a generar diversas irregularidades, algunos casos han denunciado que no se respetan sus lugares a pesar de que cuentan con los pagos correspondientes”.
Expuso que ahora se ha comenzado la búsqueda de predios para que puedan ser evaluados y se brinde nuevamente el servicio conforme a las necesidades de la ciudadanía, “confío que hay tiempo para remediar y conseguir soluciones rápidamente”.