Familiares de una paciente que llegó al Hospital Civil en labor de parto, denunciaron que no tuvo las atenciones médicas adecuadas, lo que le provocó una hemorragia que la mantiene intubada, al igual que a su bebé, quien tuvo que ser extraída mediante cesárea.
Entre impotencia y llanto, la familia de Melisa Hernández de 32 años de edad detalló que ayer lunes a las 4 de la mañana fue referenciada del Centro de Salud de servicios ampliados de San Jacinto Amilpas al Hospital Civil por un diagnóstico de preclampsia, es decir, presión alta y de alto riesgo por su embarazo.
Pero en el nosocomio “Dr. Aurelio Valdivieso” fue atendida hasta las 11 de la mañana, el primer diagnóstico que le dieron los médicos fue que requería intervención quirúrgica, pero horas más tarde le notificaron a los familiares que le darían alta voluntaria porque no era necesario que estuviera ocupando una cama.
Sin embargo, la falta de un diagnóstico claro provocó en Melisa otras complicaciones, y al revisarla hoy por la madrugada los médicos se percataron que la bebé se encontraba fuera del útero y que no respiraba.
Por lo que fue extraída mediante una cesárea y después entubada, sin embargo, su estado de salud se reporta grave.
En tanto, su mamá sufrió una hemorragia que para detenerla, tuvieron que extraerle la matriz y intubada, “esto no habría pasado si le hubieran hecho la cirugía desde que llegó”, denunció su cuñada Minerva López.