Luego de recibir la renuncia de Mariana Benítez Tiburcio al PRI, el Comité Directivo Estatal de ese instituto político, le pidió en congruencia dejar la diputación que detenta al igual que sus compañeros que recientemente abandonaron sus filas.
“Si no quieren que el priismo les escupa en la cara su traición deben dejar las curules que se obtuvieron por el voto hacia el PRI y no hacia ellos”.
En un comunicado, el CDE puntualizó: “aunque la ley no lo prevea, a la militancia no se le hace justo que ocupen el espacio del partido y trabajen para otro tipo de intereses que nada tiene que ver con nuestra organización política.”
En el documento, se expuso que la salida de Mariana Benítez y en su momento de Samuel Gurrión y Gabriela Pérez, “no se entiende, toda vez que ellos tenían un compromiso ineludible con el partido, compromiso que aceptaron tácitamente al asumir la diputación plurinominal”.
Subrayó el instituto político que, “hay cientos de mujeres con merecimientos mayores, con trabajo probado y con convicción a toda prueba que sin duda se sentirán ofendidas por esta decisión tomada por Mariana Benítez, porque queda claro que los que hoy se van cuando el partido más los necesita, no valoraron lo que se les dio, no aquilataron la oportunidad que el PRI les otorgó y no honraron su palabra, ni su compromiso para con el partido”.
El priismo oaxaqueño, aclaró, lamenta su decisión, pero deja en claro que su renuncia no incide en la grandeza del partido y mucho menos merma el trabajo que se ha iniciado con miras al 2024, en donde vale la pena decirlo será indispensable que quienes lleguen a esos espacios sean mujeres y hombres de reconocida militancia de convicción a toda prueba y de compromisos ineludibles.
“En el PRI todos somos importantes, pero nadie es indispensable. El PRI hace diputados, no los diputados hacen al PRI”, destacó.