*No hay proyecto ejecutivo y los permisos para su operación tardan en ser aprobados
El Colectivo de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca (COAO) advirtió que la crisis por la falta de un centro de disposición final de residuos sólidos en la zona metropolitana de la capital del Estado, podría prolongarse hasta el próximo año ante la dilación de las gestiones para encontrar un proyecto eficiente para contrarrestar la contingencia y un lugar para desarrollarlo.
El presidente de la organización ecologista, Gerardo Aldeco Pinelo, sostuvo que la tensión política que predomina actualmente en el estado por culpa de varios actores que se han involucrado en el problema, así como la repulsión que existe entre las comunidades para albergar en su jurisdicción un posible relleno sanitario o una planta tratadora de basura, hacen prácticamente un hecho que la solución llegará hasta 2024.
Como ejemplo, el activista sostuvo que, aunque la autoridad estatal o municipal ya contara con un predio y el aval de la población en cuestión para erigir un proyecto como el Centro Integral de Revalorización de Residuos Sólidos Urbanos (CIRRSU), presentado por el gobierno hace un mes, el trámite de los permisos, la elaboración del proyecto, la adquisición y el traslado de los equipos pertinentes, así como la construcción de la obra tardarían entre seis y siete meses, como mínimo.
En sentido opuesto, resaltó que, en la actualidad, los servidores públicos responsables de materializar aquella idea no cuentan con un predio ni con la autorización de alguna población y menos han comenzado a gestionar los permisos correspondientes para ejecutar la obra.
Otro obstáculo que enfrentan las autoridades apuntó, y que podría alargar el tiempo de solución, es que la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) exige, para dar un permiso para construir un nuevo relleno sanitario, que, primero, el gobierno compruebe que ha saneado o que ha comenzado con las labores respectivas, en el lugar donde se encuentra el basurero recientemente clausurado; en este caso, el situado en la agencia Vicente Guerrero de la Villa de Zaachila.
Aldeco Pinelo advirtió que, si se llegara a construir una planta tratadora de basura o un relleno sanitario antes de culminar el año, éste carecería de estudios y funcionaría al margen de las normas medioambientales.
Ante ello, indicó que los operadores políticos del gobierno estatal se equivocaron al permitir que el tiempo transcurriera sin que se construyera ninguna obra, pues hoy, a 12 meses del comienzo de la crisis, diversos actores han contaminado el contexto político y a través de sus influencias o grupos de choque impiden que la solución “camine”.
Finalmente, el ambientalista llamó a la autoridad estatal a analizar no solo la instalación del CIRRSU como única alternativa para solucionar la contingencia por la falta de un tiradero municipal, sino a considerar otras ideas como el hecho de promover que cada ayuntamiento construya su propio centro de disposición final o, también, construir un nuevo relleno sanitario metropolitano.